Entrevista al ayudante Solista de Clarinete de la Orquesta Filarmónica de Santiago
Assaf Leibowitz: «Maxim Vengerov sacó lo mejor de cada uno»
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Foto ©camillecier |
En el marco del concierto del Concierto 2 de la Orquesta Filarmónica de Santiago, que se presentó en el Teatro Municipal junto al reconocido director de orquesta Maxim Vengerov, entrevistamos al ayudante solista de clarinete de la orquesta, quien nos contó un poco más sobre el concierto con el destacado músico ruso y sobre su experiencia como músico Israelí en la orquesta más importante de nuestro país.
¿Tu llegaste hace 7 años a Chile?
Si
¿Cómo te incorporaste a la orquesta?
Me invitaron a tocar en la orquesta. La orquesta buscó a un ayudante solista de clarinete, durante unos años no lograron encontrar a alguien, digamos del nivel, y yo audicioné en Diciembre del 2010 y llegué aquí en abril del 2011 para un año de prueba, que se terminó más temprano, después de 8 meses, decidieron darme mi contrato definitivo y ahí me quedé.
¿Nunca habías venido a Chile?
Nunca
¿El español lo aprendiste cuando llegaste?
Si, de oído.
Tu eres Israelí. ¿Además viviste en Francia?
¿También viviste en Francia por la música?
Yo llegué a Francia para estudiar, y luego me quedé. Cada vez, también estudié dirección de orquesta, después tenía mi propia orquesta, no eran mis músicos, pero estaba de director titular de la orquesta de cámara en Francia.
¿En Paris?
No, en Provins, una ciudad, a casi dos horas de Paris. Luego acá, el 2014 gané el concurso de la FOJI, Fundación de Orquestas Juveniles, y empecé a trabajar como director asistente con la fundación, en la orquesta nacional juvenil, y luego dirigí, en otras orquestas en Chile, en Valdivia, en la Orquesta Sinfónica Nacional.
Uds tienen conciertos constantemente, y traen distintos directores de distintas partes del mundo. ¿Como se gestó lo de Maxim Vengerov?
Tenemos un director titular que dirige como 2 óperas al año y algunos conciertos sinfónicos, y después llegan directores invitados. Son elección del director general que es Frédéric Chambert. En este caso, traer a Maxim era una idea de él, trabajó en concretizarlo hace mucho tiempo. Maxim tiene un calendario súper apretado. Ha sido una de mis mejores experiencias aquí en Santiago, porque su manera humana de comunicarse con los músicos era espectacular. Primero, hablaba al nivel de los ojos, y luego siempre se tomó el tiempo para sentarse con cada músico y explicar exactamente lo que quiere, como uno puede mejorar, y de verdad sacó lo mejor de cada uno, y lo mejor de la orquesta también y la gente que viene a escucharnos frecuentemente saben que, hoy por ejemplo, la orquesta sonó mucho mejor, nada que ver con otros conciertos que estamos haciendo. Sacó este sonido de la orquesta con mucho trabajo, con mucha atención, sin dejar las cosas, y con un oído, que es suyo, sabe perfectamente el color del sonido que está tocando.
La verdad es que trabajó más con la cuerda porque es la masa sonora de la orquesta. Eso efectivamente logró su resultado. Otros directores no hacen eso. En su caso casi era mitad y mitad. Otros directores preferían trabajar más Shostakovich porque tiene desafíos técnicos más grandes. Mi opinión personal es que Mozart es mucho más delicado y transparente. Todos piensan que Mozart es fácil, y necesitas dos ensayos y estás listo. Él no. Él quiere hacer de Mozart la joya que es. Se escuchó. Tenía cada concierto para escuchar y increíble el sonido.
¿Cuánto tiempo ensayaron?
No mucho, la verdad. Teníamos 2 ensayos para el Shotakovich por lo menos, porque yo no toqué Mozart, más un ensayo paralelo. No mucho.
¿Uds se lo sabían de antes?
No
¡No es nada entonces!
Es la profesión.
¿Que es lo que te gusta del clarinete? ¿Por qué te llamó la atención dedicarte a ese instrumento?
El sonido, es muy dulce. Las diferencias de dinámica que van de casi inaudible hasta fortisísimo, que es muy potente. El timbre, sobre todo el timbre. Yo estudié en Francia entonces ponen mucha atención al timbre, que es muy particular para la gente que toca en Francia. Por eso, de hecho, en los concursos internacionales los clarinetistas franceses siempre ganan, porque tienen algo muy particular en la manera de tocar, hay una escuela de clarinete muy antigua y muy desarrollada.
¿Comenzaste a tocar clarinete en Francia?
No, empecé en Israel con un profesor norteamericano. De hecho cuando llegué a Francia tenía que cambiar todo, la embocadura, porque es otro estilo de tocar.
¿Habías probado otros instrumentos también?
Si, yo toqué un poco de saxofón, empecé con piano, y como cualquier niño judío mi abuela me llevó de la mano para estudiar piano, y toqué 6 años piano, lo que me ayuda como director, para las partituras y todo eso.
Más adelante ¿Quieres seguir con esto? ¿Te gustaría dedicarte más a la dirección de orquesta?
Me gustaría dedicarme más a la dirección de orquesta, pero es un tema muy político, y digamos que no tengo los buenos contactos que me puedan ayudar a dirigir tal y tal orquesta. Ese es el problema. Estoy trabajando pero tengo la desventaja que no soy chileno así que hay poco deseo de ayudarme, y también a la competencia que hace todo para cortar todo lo que se puede.
Si te llaman a dirigir a otro país ¿Te podrías ir? ¿Cuál es el plan?
No tengo un plan definido. Por el momento estoy acá.
¿Te gusta Chile?
Si, es una pregunta difícil, si y no. Hay cosas que si y hay cosas que no, como en cualquier lugar. Hay cosas buenas, hay cosas menos buenas, pero estoy aquí.
¿Estás aquí con un contrato por cierta cantidad de años?
Si, yo creo que si no llega algo mejor, hasta la jubilación.