
Por Larisa Rivarola
Enero de 2019 plantea una coyuntura complicada para la Argentina, donde la sensibilidad social y la mirada sobre el prójimo necesitan ser rescatadas y devueltas al centro del discurso dominante. Y en el mismo sentido, en el circuito teatral alternativo también en muchos aspectos, necesitamos discutir con el paradigma que todo lo reduce a mercancía. Entonces y sin desatender la objetivación que subsume a los espectáculos que en los festivales circulan, encontramos en el marco del 12° Festival Internacional de Buenos Aires, la propuesta invitada por PROTEATRO, el organismo público de dicha ciudad, responsable de la promoción del teatro independiente, como exponente de aquella mentada sensibilidad. La obra fue una de las propuestas nacionales que dio cierre al festival el pasado 3 de febrero.
Chajá de Luis Cano, es una de las obras seleccionadas en la convocatoria 2018 de Subsidios a la Producción teatral de PROTEATRO; y forma parte de un tipo de obra, no habitual, que no apela al efecto ni a la sorpresa, sino al universo sensible de la mera digresión. Un relato que es sucesión de recuerdos, capas de una misma memoria que se confunden con un presente que se va construyendo a través de detalles. Chajá prescinde de la obligada progresión, del desarrollo convencional del conflicto, entonces desde un punto de vista del relato clásico no “hace”. Chajá “es” un intento de abordar el propio pasado. En ese universo que transcurre como el recuerdo de Claudia (interpretada por Laura López Moyano), ella y Alejandro (en la piel de Marcelo Minnino) “son” aquello que eran, aquellos que parecía que podrían haber sido, y aquellos que finalmente no.
A través de sutilezas, Laura López Moyano encuentra nuevos tonos en su actuación, valorizando silencios, interlocuciones a público y un juego de gran armonía en su relación con Marcelo Minnino a través de la escucha, entablando una relación rodeada de los miedos, las dudas, las fantasías y los deseos de una adolescencia campera y algo tortuosa para ambos. El contacto y la distancia de los cuerpos dan cuenta de la fragilidad y la soledad de los personajes, incluso en medio de un torbellino emocional entre presente y recuerdo, y la dificultad por comunicarse. El habla de ambos da cuenta del devenir, la pronunciación pausada, sin apurar las palabras ni empujar las sílabas, elaborando la temporalidad que quiere ponerse en acto. Y que bien logra en la dirección, Luis Cano.

Al mismo tiempo, si bien la particularidad de Claudia (que aquí no develaremos) justifica la intensidad de la propuesta sonora, que evidencia elecciones precisas, el trabajo con el sonido va más allá de la obviedad. El espacio se construye en cada efecto, pista musical, voz y silencio, junto con los matices de una iluminación y un diseño escenográfico que no operan como una postal decorativa sino como elementos claves en la construcción de aquel mundo. Ese mundo añorado y fugazmente vuelto presente por Claudia para encontrarse con que ni siquiera el más fiel de los recuerdos le garantiza una verdad.
Hay en Chajá una elección en favor de la creación de una historia, la forma que toma el relato y el transitar de los personajes por él; por sobre un desarrollo y un clímax. Podríamos forzar un desenlace si quisiéramos la comodidad del espectador pasivo y la emoción tranquilizadora, pero cabe aquí elegir lo segundo, ese infinito transcurrir de Alejandro y Claudia que podemos imaginar si no nos dejamos engañar por el supuesto cierre que aparenta el apagón final.
Temporada 2019: Viernes 21 hs.
Sala: El Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034, CABA)
Ficha Técnica
«Claudia» Laura López Moyano ; «Alejandro» Marcelo Mininno
Diseño de iluminación Ricardo Sica
Diseño y realización de escenografía y vestuario Laura Poletti
Realización de vestuario Cintia Ledesma
Asesoramiento físico Marina Otero
Dirección de voces y capturas de audio Tian Brass
Diseño sonoro Luis Cano
Banda sonora Tian Brass, Luis Cano
Tratamientos sonoros Alejandro Dramis e Irene Dogmática
Edición Luis Cano, Meel Arcuri y Tian Brass
Gestión y financiamiento ejecutivo Larisa Rivarola Szabason
Fotografía Pablo Morgavi
Piezas gráficas Laura Rovito
Asistencia de escena y operación de sonido Maia Postolski
Asistencia de dirección Meel Arcuri
Dramaturgia y dirección general Luis Cano
Seleccionada en la convocatoria «Más teatro» de la Fundación SAGAI, 2018.
Subsidiado por PROTEATRO, 2018.
Invitado por PROTEATRO para el 12 FIBA, 2019.