Por Fabián Cabello
El ritmo del beat sacude un oscuro y vacío escenario durante varios segundos, al encenderse las luces una joven vestida de negro comienza a realizar su performance, primero de un modo sutil y cautivador pero… es baile urbano, así que estos movimientos se van tornando más poderosos y frenéticos, intensidad que acompañará cada momento del espectáculo que se presentó en el marco de Santiago A Mil y trajo consigo a una de las compañías más importantes de danza urbana en el mundo, que a su vez es todo un estandarte de la cultura hip-hop de Estados Unidos.
Rennie Harris, célebre coreógrafo y pionero en la escena del baile urbano es el cerebro detrás de la compañía Puremovement que mezcla la danza contemporánea, el hip-hop y otros ritmos urbanos, y que con su espectáculo Nuttin but a word (o Nada más que una palabra) nos presentó una espectacular coreografía realizada por siete bailarines que con pasos de hip-hop, breakdance y house relatan la historia de la cultura que hoy ha conquistado todo el orbe.
La coreografía está dividida en varias partes, cada una cuenta magistralmente el desarrollo de estos bailes y performances que crecieron al alero de la cultura afroamericana y las luchas de esta comunidad en el país del norte. Presentaciones en grupo y en solitario de cada uno de los integrantes de la compañía son acompañadas por vibrantes piezas musicales que intercalan los movimientos de los bailarines.
Cada una de las brillantes presentaciones de los integrantes de Puremovement contemplaron un gran esfuerzo físico en cada movimiento, giro, paso, salto y acrobacia que hicieron sobre el escenario y que generó que el público tuviera una interacción continua con ellos mediante gritos y aplausos que generaron una especie de cofradía, cercanía que poseen per se las presentaciones de danza urbana con quienes forman parte de la audiencia.
Nuttin but a word tuvo tres presentaciones en esta versión de Santiago A Mil, todas gratuitas, y como era de esperarse con una considerable cantidad de público joven, varios de ellos también bailarines de danzas urbanas que vibraron con el show ya que se podía percibir a flor de piel la emoción por estar presenciando un evento a los que pocas veces han podido asistir en nuestro país. Había una atmósfera de que existía valor en lo que hacían y que estar ahí viendo a una compañía de talla mundial validaba su a veces olvidada forma de expresión.
Una de las cosas más interesantes además, claro está, de la incorporación de estos tipos de danza en la programación del festival, fue la invitación para que al final del show el público también se hiciera parte y subiera al escenario, junto con los integrantes de la compañía, lo que acerca inclusive a gente que no tiene mucha experiencia a poder vivir de pálpito propio una jornada de mucho movimiento y emoción.
Iniciativas como Nuttin but a word y como Emerger de José Vidal y Cía. que se presentó en la versión 2020, proponen un nuevo entendimiento sobre los límites de la danza, lo urbano y su vinculación con la gente, y abre las puertas a miles de jóvenes, que como sucedió luego de las presentaciones se fueron bailando hasta sus casas con el deseo de seguir creciendo en esta disciplina.
Título: Nuttin but a word
Dirección: Rennie Harris
Intérpretes: Joshua Culbreath, Phillip Cuttino, Katia Cruz, Mai Le Ho Johnson, Tatiana Desourdin, Yuko Tanaka, Emily Pietruszka
Jefe de la compañía: Rodney Hill.
Producción y diseño: Bob Steineck
Apoyado por: Mid Atlantic Arts Foundation a través de USArtists International en asociación con National Endowment for the Arts y Andrew W. Mellon Foundation