Entrevista al escultor chileno en Puerto de Ideas
Fernando Casasempere: «Llega un momento en la vida en que hay que dar de vuelta a nuestro país»
Entrevistamos en Puerto de Ideas a Fernando Casasempere, uno de los escultores chilenos más importantes a nivel internacional, quien nos cuenta acerca de sus obras, sus exposiciones, los materiales con los que trabaja, su vida en Londres, dónde vive hace 20 años, y sus proyectos a futuro, tanto en Chile como en el extranjero.
¿Cómo ha sido volver a exponer en Chile? Con «Mi andadura» fue como el gran regreso. ¿Cómo fue esa experiencia?

¿Qué significó para ti la obra «Out of sync»?
La obra «Out of sync», lo que significó para mi Fernando Casasempere, para el tipo que se va, porque uno es el artista pero también es el humano, es wow, la ciudad que te aterra, de llegar a Europa, siendo chileno, artista. Tu pasas por la National Gallery, ellos escriben la historia, ellos escriben la enciclopedia, entonces uno les tiene un respeto y un susto grande. Fue que me reconocieron, que me dieron un espacio, mi obra representó parte de los Olympics. Fueron 5 museos en Londres, que tuvieron que hacer algo para celebrar las Olimpíadas, y me eligieron a mi, entonces partiendo por eso. Un reconocimiento en el mundo serio del arte Europeo, a mi obra. Eso ya es una gran satisfacción, una gran inyección de seguridad a lo que uno está haciendo, tiene una calidad y una seriedad. Después, el formato. Fui capaz de hacer una obra que cubre casi una manzana, dentro de un palacio en Inglaterra. Después, la posibilidad también de hablar de una manera muy positiva del reciclaje, no es una demanda, solamente, es buscar soluciones, y darme la posibilidad de reglarla a mi país. Es un círculo, no solo eso, regalarla al país ¿porque yo pido que quede en Antofagasta la obra como destino final? Yo el 91 saco basura, por decirlo así, deshechos industriales, de Antofagasta y 20 años después vuelven convertidos en arte, vuelven convertidos en flores. Es un circulo muy redondito. En lo profesional, un reconocimiento enorme, en la monumentalidad, en la segunda etapa de la vida de un escultor que tiene que pasar a lo monumental, volver a poder devolverle a Chile, significa que uno puede hacerlo, en términos económicos, en todo lo que significa. Que quede en un lugar dando el mensaje en el que uno cree.
¿Como funciona tu proceso creativo? ¿Como parte tu trabajo? ¿Hay algo que te inspire? ¿Algún material?
Son dos cosas distintas. Si, el material, la arcilla siempre me inspiró, siempre me interesó, siempre me sentí cómodo, es el que me hace anclarme a un continente, al continente al que yo pertenezco. El mármol blanco no tiene nada que ver con nosotros, es un efecto de la historia. Este es un país que fue conquistado por Europeos, por lo tanto era lo que había que hacer, era fácil ponerlo de moda. Además una negación a lo conquistado. Yo me trato de instalar desde más atrás. Desde nuestro continente. Yo creo que las culturas prehispánicas, hacerles una sacada de sombrero, son magistrales, lo que hacen en la obra de ellos, para mi gusto, casi más interesante, mejor que lo egipcios. Entonces me conecto ahí, para poder hacer desde la materia. Después voy desarrollando. Yo tendría que decir que mi obra se sustenta en tres pies; la escultura prehispánica, el paisaje chileno, sobre todo el norte, hoy día me voy a estar enfocando mas en el sur, empieza a hacer un cambio, y este Fernando inglés que empieza a aparecer por vivir 20 años en un país extranjero, y ya te empieza a influenciar, desde Inglaterra. En la primera etapa mis obras son más mirando la escultura objeto, que el arte precolombino lo refleja tan bien, no es solo un jarro, es un jarro pato, que tiene un asa, que tiene una carita, está la escultura, está lo ritual. Esa es la primera parte. En el paisaje están todos los colores del norte en toda mi obra. Después está Fernando inglés que está construyendo ahora con bloques, el ladrillo es una forma, es cerámica, yo lo uso de manera contemporánea. Si vas a Londres, el 70% de las ciudades están construidas en ladrillo. Eso es la base donde yo me muevo en mi obra, lo que voy a hacer en una exposición. Otra cosa es cuando te invitan, como por ejemplo, ahora estoy en Chile armando una escultura de 100 metros de largo, en un edificio en Santiago llamado CV. Ahí ya es otra cosa, a mi encantan las comisiones. Son mucho trabajo, pero te pone en problemas que tu nunca hubieses pensado. Tienes que solucionarlo. Eso ya es muy entretenido porque de ahí pueden salir nuevas ideas, nuevas directrices en tu trabajo. Por ejemplo, en esta comisión lo que yo vi es un edificio extraordinariamente bonito, extraordinariamente generoso, donde yo me estoy instalando, tiene casi 6 metros de altura, eso es generoso, porque en 6 metros sacan otro piso, si quieren números duros y puros. Ellos lo sacrifican por la belleza, por aportar a la ciudad, por aportar al urbanismo y a la arquitectura. Invitan a un artista, eso también se lo podrían ahorrar. Lo que veo ahí es mucho aire, mucha luz, tonos grises y digo aquí cabe trabajar, colgar una obra, utilizar el aire a favor de la obra. Se llama emigraciones, está imitando lo que hacen los pájaros, los pájaros vuelan en el aire y arman figuras. Son las formas de lo que tu vas afirmando para ir haciendo tus obras.
Te gusta intervenir espacios públicos pero sin modificarlos. ¿Como haces eso?

¿Cual es tu obra mas querida?
En la que estoy trabajando hoy, es en la que estás trabajando. Todas las obras son muy queridas. Uno las quiere a todas.
¿Cuál es el mayor desafío para ti como escultor?
Ser serio. Ser un escultor serio. Por lo mismo que te digo. Hay veces que yo sé que si pongo un color turquesa, la gente va a decir ¡ah! les va a encantar ¡No, no! porque yo sé que en dos semanas más van a estar agotados de eso. Ser serio. Yo me fui de Chile por seguir exigiéndole a mi trabajo. Uno deja los amores, deja la historia, deja todo, porque uno se debe a lo que decidió ser. Yo decidí ser escultor y quiero ser serio. Si hay algo que me dejó la exposición «Mi Andadura» en el Bellas Artes, que tu no te los esperas, es que de verdad, y con toda la humildad que requiere, caminé por mi vida. Pero yo miro y mi obra cambió. Miro para atrás y he sido serio. He sido una persona que no ha tomado los caminos fáciles.
¿Que es lo que te gusta de la cerámica como material?
Todo. Primero, es un material super agradable para el día a día. Lo tocas y es exquisito y te envuelves en él y te lavas con agua y sale, no es grasoso, no tiene esa cosa que tomas un fierro oxidado y la mano que te ugh, partiendo por ahí. Segundo, es infinita las posibilidades que te da la arcilla en términos de colores, de texturas, de todo. Es infinita. Tu tienes que pensar que todo lo que mostré en el museo son formulas mías. Yo hice mi propia arcilla. Yo teñí esa arcilla de colores, entonces es muy fascinante, porque tu tienes dos formas de hacer tu obra. Uno, voy a hacer tal ahora, voy a hacer esta mezcla de arcilla porque para esa obra, esa idea, creo que va a funcionar bien. Esta textura, este color, este brillo, o de repente vas a tu laboratorio, o a tu mesa de ciencia, como digo yo, donde tienes todas tus muestras, esto no me acordaba que lo tenía, esto puede ser super bonito para hacer tal cosa, super interesante. Eso me fascina y lo otro, lo mas fundamental, es un material donde los americanos, los nativos de América fueron master. Eso también para mi es muy importante. La arcilla me anclaba a mi continente, y me permitirá agradecer y reconocer la grandeza de los pueblos prehispánicos, que no siempre nosotros lo hacemos, tu sabes.
Que piensas acerca del arte en Chile. ¿Crees que ha mejorado desde que te fuiste?
Sin duda, pero yo creo que el arte en Chile sigue siendo muy difícil. Yo lo he dicho en otras entrevistas, los artistas en Chile son verdaderos héroes, porque todo en contra de ellos. No es porque se sientan y digan oye, vamos a sonarnos a los artistas, porque es un país pequeño. Es un país donde todavía no entienden lo importancia y lo que puede aportar la cultura, el arte, las ciencias. Me imagino que ha mejorado, estoy bien perdido, pero tu lo ves, no le dan el espacio, no les dan los presupuestos.
¿No tienes planes de volver tampoco?
No. A ver, estoy volviendo. Este es una manera de volver. Volver a vivir aquí definitivamente no, no tengo planes, tampoco te digo que no lo vaya a hacer. No voy a tomar esa responsabilidad, después me van a decir tu dijiste, no. Yo sigo muy fascinado. Cuando yo me fui de Santiago, después de «Mi Andadura», te imaginas, fue un éxito rotundo, a mi me impresiona la cantidad de gente que la vio, lo que les gustó, se vio bien el museo, llenamos el museo, todo. Europa nunca es fácil, te vuelves y tu vas con eso, ahora partes de nuevo. Yo cada vez que llego a Londres después de un viaje, me toma dos o tres días volver al taller, normalmente me voy a la Tate, camino alrededor de la Tate, te encuentras con al ciudad. Entré a la Tate, y estaba la Mona Hatoum, la artista que a mi me fascina. Y ahí se me mueve el cuerpo, dije claro, por favor te lo remarco, con el respeto que eso significa, a mi Londres me sigue alimentando. Yo estoy alimentando a Chile. No puedo venirme, no quiero venirme, necesito eso, ese alimento que me sigue dando, que le sigue dando a mi obra.
¿Que artista, ya sea europeos o Latinoamericanos, son los que más admiras?
A muchos, pero si yo te tuviese que decir, me interesa mucho Tony Cragg, me interesa mucho Anselm Kiefer, por decirte un par. Después claro si uno sigue, Anthony Caro, me interesa como rompe la estructura, pero Tony Cragg, para no ser tan injusto, si no se quedan muchos afuera, me parece super interesante lo que el hace, una investigación desde los materiales que usa, es un loco. Richard Long, es otro tipo fascinante. Locos en su locura, eso me parece super atractivo poder ver.
¿Que se viene a futuro? ¿que planes tienes?
Los proyectos más a futuro y mas inmediato es esta escultura que estoy instalando en el edificio CV. Estoy ya hace un año trabajando en una exposición muy grande en San Diego, California, son 500 mts cuadrados la sala, con un libro, ese es un gran proyecto, para el 2019. El 2018 el gobierno Japonés me invita por 6 meses a trabajar en Japón, estoy desde Octubre hasta enero, con un taller, una exposición, con materiales, con arcillas. Esos son los dos proyectos que me tienen más entusiasmados y mas preocupados porque son bien grandes.