Por Gabriela Bravo desde Cannes
El director brasileño Karim Aïnouz vuelve a la competencia oficial del Festival de Cannes con la película Motel Destino, rodada en noreste de Brasil.
Motel Destino cuenta la historia de Heraldo, un joven delincuente que debe huir luego que un trabajo saliera mal. Es en el motel donde antes hubiese pasado la noche que Heraldo encuentra refugio, allí conoce a Dayana y Elías, uno los dueños del motel que le permiten quedarse a cambio de que los ayude con el funcionamiento del establecimiento. Sumergidos por el ambiente erótico que los envuelve, Heraldo y Dayana se entregan a una relación tórrida, a espaldas de Elías.
El director Karim Aïnouz utiliza los colores y la luz para dar una textura a la película que evoca la sexualidad, el encierro y también la artificialidad de este lugar en donde no se sabe si es de día o de noche.
Culturizarte pudo conversar con el director en Cannes
El año pasado estuvo presentando su película Firebrand en el Festival de Cannes y aquí estás nuevamente con Motel Destino.
Así es, filmando sin parar. Es genial, filmaré de nuevo en septiembre en North Dolomites. Creo que todos tenemos un momento. Todos perdemos a nuestros padres en algún momento y mi madre estuvo muy enferma, entonces no trabajé por cerca de cinco años, o sea, solo estaba enseñando, pero no haciendo películas. Luego ella falleció y sentí que no tenía mucho tiempo y estoy apurado de cierta manera. Amo hacer películas, así que he sido afortunado de poder hacer una tras otra, pero lo amo.
¿Tienes todas estas ideas en tu cabeza?
Sí. Es chistoso, de cierta manera, porque tengo esta paranoia de que nunca podré hacer otra película, entonces siempre tengo como ocho películas en desarrollo. Porque algo puede pasar, algo puede salir mal, es así como he seguido. Pero pienso que hubo un momento en el cual quise hacer más películas que nunca. Creo que es la edad, porque sigo pensando que si trabajo por 15 años más, son 10 películas más. Tengo muchas ideas que quiero trabajar, pero pienso que es muy complejo tener todas estas cosas en desarrollo, creo que es lo que me mantiene vivo y lo que amo. Hay algo sobre tener diferentes ideas y creo que pasa que como no soy escritor, pienso que pueden pasar, en cambio si las escribiera directamente, sería más complicado, porque ahí tienes que seguir un solo proyecto a la vez.
¿Eso significa que Hollywood te ayuda a cumplir tu sueño de 10 películas en 15 años? ¿Sería más fácil trabajar en Brasil y en Estados Unidos?
Es gracioso, porque nunca había pensado trabajar fuera de Brasil porque en los últimos 15 años en Brasil ha habido un excelente sistema de financiamiento, pero lo que pasó con Bolsonaro y la extrema derecha. Tenía muchos proyectos que quería hacer en Brasil cuando fueran financiados y un par de proyectos en Alemania, pero con las elecciones y la extrema derecha, todas las instituciones que financiaban fueron canceladas o detenidas. Entonces, así fue como empecé a pensar en hacer películas afuera, y así surgió Firebrand. Pero, también sentí que sería una experiencia interesante trabajar con estrellas porque creo que son maravillosas, pero también porque creo que las películas serán vistas. Es importante pensar eso, porque hacer películas en inglés, es un idioma más conocido y estoy muy feliz con las películas, pero la vida de las películas es muy limitada. Entonces era algo nuevo que quería experimentar.
¿Este tipo de experimentos te enseñan mucho?
Al hacer Firebrand por ejemplo o las otras cosas que haré ahora, tengo una relación muy distinta con el elenco. En las películas brasileñas hay una relación muy distinta con la producción. Uno no puede olvidar que en las películas brasileñas están siendo financiadas en su mayoría con fondos públicos y que las películas en inglés están financiadas como un tipo de inversión, entonces creo que hay una presión distinta. Creo que hay distintos tipos de presiones con los actores, por ejemplo, en esta nueva película que estoy haciendo e incluso en Firebrand, me encanta ensayar mucho, pero no para repetir las líneas exactas, sino para tener el espacio y descubrir en sí la escena. Para mí ese es el mayor desafío, el tiempo que pasas con el elenco.
¿Qué pasa con la presión que hay en Hollywood y la de Brasil? ¿Sientes presión por la cantidad de dinero invertido?
Sí siento la presión, pero no pienso en ello, porque si lo hiciera sería muy difícil. Creo que tengo un privilegio. Por ejemplo, si hago una película que cuesta X millones y no recupera el dinero, siempre tengo un colchón de aire que es filmar en otro lugar. Creo que ser del sur es genial porque sigo pensando que si fuera un director inglés y a mi película no le fuera bien, probablemente pasaría cinco años en espera. Así que creo que es divertido hablar de esto hoy porque hice Firebrand y luego esperamos a que esta película saliera ahora, y luego estaré haciendo otra película inmediatamente después de la película en Italia. No habría hecho Motel Destino si hubiera estado esperando. Pero creo que la desventaja de ser del sur es que el inglés no es mi lengua nativa. No me crié en Hollywood, no soy un nepobaby. Entonces, están todas estas cosas que llevan tiempo para que entres en ese mundo, pero al mismo tiempo, nunca estaré esperando eternamente. Creo que es algo corrosivo cuando haces películas. Así que creo que es fantástico tener lo mejor de dos mundos. Por un tiempo no había financiamiento en Brasil, así que estoy establecido en Berlín.
¿Estás establecido en Berlín? ¿Cómo te ha afectado esa distancia con Brasil según tu perspectiva?
Retrocedamos un par de pasos. Estoy establecido en Berlín, pero antes de irme de Brasil, cuando tenía 17, vine a vivir a Francia, porque mi papá es de Argelia, así que viví acá un par de años, pero eran muy racista y no lo soporté, así que me fui a vivir y estudiar a Nueva York y luego a Berlín. Entonces he estado mucho tiempo lejos de casa, pero no realmente, porque en términos de alma, y de crianza, mi hogar está en Brasil. He trabajado los últimos doce años allá y, de hecho, esta película es fruto de eso. Establecí una escuela de escritura de guion en Fortaleza, y suelo ir ahí y enseñar todo el tiempo, así que no es algo solo de mi sangre, sino de mi vida.
¿Por qué escoges la temática del motel? Es muy latinoamericano, en Europa no es tan relevante, pero en Latinoamérica sí.
Antes del motel está la historia de estos dos personajes. Es una película tradicional de cine negro y es bueno hablar sobre eso. El cine negro nace en los años post guerra y muestra personajes que están muy rotos y creo que lo que hemos vivido en Brasil los últimos cuatro años ha sido una guerra. Siento que la agenda era destrucción, destrucción, destrucción. Creo que era un camino interesante. Eso fue lo primero que se me vino a la mente. Luego la idea del motel, es un clásico del cine negro. Existe este ciclo, brillante, incluso en el neo cine negro, hay un tipo de espacio en el que todo puede pasar. Siempre sentí que el motel es una creación brasileña, no me refiero a los “moteles de amor”, porque esos existen en muchos países, pero, estos moteles que están en la mitad de la carretera, entre ciudades. Sentí que era una manera interesante de explorar este tipo de inconsciente, porque los moteles son lugares en donde puede pasar cualquier cosa, porque cierras la puerta y cualquier cosa puede pasar, desde un asesinato hasta el amor, pensé que era una idea interesante. Estaba muy interesado en escoger algo único de Brasil, algo que no existiera en otros lugares.
Hablando de eso, están como en agujero infernal, como atrapados, pero no ahondas mucho en eso ¿Fue una decisión?
No lo veo como un agujero infernal, es simplemente como un hoyo. Es un tipo de metáfora de Brasil, de cierta manera. Porque la única razón por la que existen moteles es porque la gente no puede tener sexo en la playa, o en el auto o en el bosque o en la casa de sus padres. Es una preocupación. No tanto hoy en día, pero creo que antes era muy conservador. Para mí, el motel es un lugar donde las hipocresías son exorcizadas. El boom de los moteles llegó en los años 70 cuando llegan los militares al poder y hay una revolución sexual. Entonces hay una gran contradicción entre el hecho de que puedes tener sexo con tu pareja antes del matrimonio, pero no tienes un lugar a donde ir. Desde el exterior se ve paradisiaco, pero en la realidad es un espacio peligroso. Es complejo decir peligroso, pero es un lugar donde no estás a salvo, en ese sentido, el motel no es un hogar. Es más bien una prisión para mí. En el caso de esta película es una prisión donde hay un vortex de deseo. Creo que la mayoría de los directores de mi generación, que vienen del sur, nos hemos visto obligados a hablar de la realidad. Y no digo forzados, pero creo que hay una tradición, y es lo que el norte quiere ver. Quieren ver al sur como una realidad y creo que es la primera vez que no solo muestro realidad. Tal vez, no como Lynch lo hubiera hecho, pero entiendo que hay cierta timidez, es la primera vez que lo he hecho, entonces estaba tratando de entender qué tan lejos puedo llegar. También soy muy paranoico de perder el hilo de energía, entonces tal vez pude haber puesto más tabasco en mi comida. Para mí, fue muy complejo, porque era un nuevo ámbito en el que estaba experimentando. Creo que hay otros ejemplos de directores del sur, que están haciendo trabajos que no están basados en la realidad, y es muy complejo. Para ser honesto, ninguna de las escenas de sueños o alucinaciones o recuerdos estaban en el guion. Es algo que hice mientras filmábamos y empezó un día. Hay una obra visual de un artista llamado Dog Atkin y si han visto esta pieza, se llama Migración, y pone animales en piezas de hoteles. Por ejemplo, hay un caballo y un león. Estaba pensando en eso un día durante la producción y le pedí a mi productor que trajeran a la cabra a la pieza, me preguntaron por qué y les dije que no tenía ni idea, pero que tenía una intuición de que podría ser interesante tener a estos animales en un espacio de deseo. Es divertido, porque es algo que realmente salió en la grabación. Vi mucho de Lynch antes de hacer esto, porque creo que es un genio en ingresar al inconsciente. Prepárense, porque en la siguiente habrá mucho más.
¿Qué tanto tuvo que ver el uso de colores en alejarte de la realidad? ¿Y cómo subvierte el cine negro?
Creo que fue más que subvertir lo del cine negro y la tradición de sombras. Hay algo sobre vivir en las sombras en el diseño de la luz de las películas de cine negro, las cuales creo que vienen del expresionismo alemán. Primero que nada, hay mucha luz de día, y no es solo la luz, sino la cantidad de tiempo que hay luz de día. Fui muy curioso sobre cómo podía reinterpretar las sombras, cómo puedo traer un elemento de tensión. Porque creo que las sombras son el contraste, la tensión y pensé que tal vez podía hacerlo con el color, pero debo admitir que estoy un poco obsesionado con el color. No creo que pueda hacer una película en blanco y negro. Hay algo sobre el color para mí, que siempre tiene que estar presente en todo lo que hago. Es muy interesante, porque pienso nuevamente en Lynch, pero ahora pensando en el color. La primera vez que utilicé luces de colores fue en La vida invisible de Eridice Gusmao y se sintió maravilloso poder usar color como un elemento para contar historias y no solo como un elemento del set. El color puede ayudar a traducir a los personajes una sensación de escena. Entonces, hay dos cosas, una es el color en el espacio y la otra es el color en la cinta. Creo que otro elemento importante de la película es la cinta, la cual es celuloide. Esta película fue filmada casi en la línea del Ecuador y la luz es muy perpendicular. Quise hacer esta película en cinta porque pensé que lo digital no está hecho para esta luz, porque hay muy pocas películas hechas en esta latitud, entonces cuando llevas la cinta a imagen hay mucha más saturación y es parte de los elementos.
El motel da la sensación de ser como un monasterio, donde las personas pueden ocultarse ¿Es un tipo de concepto?
Nunca está la policía en eso lugares, porque creo que la policía está en los espacios públicos. Hay tanto que pasa en los lugares públicos que los moteles, no diría que son sagrados, pero sí protegidos. Nunca son invadidos, no es un lugar donde haya trabajadores sexuales, o sea, puedes llevar a un trabajador sexual ahí, pero no están trabajando, no es un problema. Creo que es un lugar perfecto. Es como en los Estados Unidos en los años 30, cuando comenzó la época de la prohibición, muchas drogas y alcohol se traficaban en los moteles, entonces es un tipo de espacio seguro que nunca es tocado por la policía. Pero prefiero pensarlo más como un volcán que como un monasterio.
¿Puedes hablar sobre la manera en que filmaste los cuerpos? Porque por un lado hay un aspecto sexy, pero también muestras cuerpos normales
Estoy enamorado de la gente y creo que no estoy enamorado de contar historias, amo más a la gente que contar historias, entonces es un conflicto constante. Estoy siendo muy honesto con ustedes, no quiero que digan Karim odia contar historias, pero realmente me interesa la gente y creo que contar historias es una manera de enganchar al público en algo. Entonces, para mí el centro de la pregunta es el cuerpo, porque la gente no es abstracta. Para mí el cuerpo es algo realmente importante y creo que la manera de filmarlo es muy simple. Lo que amo hacer es tener la cámara en la superficie de los personajes, entonces está en la superficie del cuerpo cuando estoy filmando. La cámara se va a mover de cierta manera, porque es un punto de vista, entonces siempre soy muy cuidadoso de que no se mueva de manera aleatoria, sino que siempre siguiendo los cuerpos. A veces pasan accidentes maravillosos, hay cosas que no puedes planear, porque están capturando la realidad. Normalmente trato de pasar cuatro semanas con los actores en las locaciones, desarrollando escenas. Rara vez estoy filmando escenas, porque estoy filmando a mis personajes, quiero hacer del cuerpo algo que no solo esté presente, sino que también sea un vector de energía, que haga que la cámara y la edición se muevan. Hay algo que me inspira mucho, y es la fotografía, ya que hay cercanía y cuando filmas a tus personajes hay una conexión entre la cámara y el personaje. Siempre recuerdo a Velásquez. Un pintor hizo un documental hace un par de años y realmente entendí que él era un tipo de camarógrafo antes de que la cámara existiera. La sensación del cuerpo en sus pinturas es algo que realmente admiro.
Es también bastante queer, creo
Vayamos a eso. ¿Crees que es queer? Es una pregunta en serio. El otro día llegué y estaba esperando mi equipaje y Lukas Dhont –que amo su trabajo – se me acerca, nos abrazamos y le dije “llegaste el primer día del festival” y me dijo que estaba en el jurado de “queer palm” y le dije que era fantástico y me dijo “¿sabes que estás en la lista?” y le respondí “¿En serio?”. Estaría honrado si la perciben como una película queer. De todas maneras, una de las cosas interesantes de hacer esta película era de cierta manera desbloquear las identidades.
La narración, los colores, la manera en que filmaste al protagonista y las pequeñas cosas entre los personajes, como pequeñas pistas. Siempre hay algo en el fondo y tienes una sensibilidad queer.
Yo soy queer, así que, siempre puedes decir que una película hecha por una persona queer es una película queer. Es una manera de decirlo. Pero creo que hay una sensibilidad en la manera en que miras el cuerpo de un hombre, hay una sensibilidad en la manera que miras el cuerpo de una mujer. Hay sentido del humor, pero creo que pude haber ido con el triángulo amoroso, pero creo que la razón por la cual no lo hice es porque quería que Elías tuviera una sexualidad complicada y reprimida. Cuando quiere besar a Heraldo, es porque se siente dejado de lado y siendo un hombre privilegiado blanco es muy difícil este sentimiento. No sé qué tan queer sea, pero me interesa mucho este quiebre de masculinidad. Estos hombres son muy patriarcales, horribles y tóxicos y no creo que todos ellos son homosexuales reprimidos, pero sí creo que hay algo sobre el deseo y creo que sí hay cierto sentido de ser afeminado. Pero me siento muy feliz que no fui ahí. Para mí, la pregunta central está en la solidaridad entre Dayana y Heraldo, incluso más que el amor. Sentí que si iba hacia el amor la película sería sobre eso. Yo soy full queer, pero todos somos un poco queer y feministas.
Ficha técnica
Título: Motel Destino
Género: Drama
País: Brasil
Año: 2024
Duración: 115 minutos
Director: Karim Aïnouz
Elenco: Iago Xavier, Nataly Rocha, Fabio Assunçao