Por Gabriela Bravo Chiappe
Cacería de Brujas es la última película del director italiano Luca Guadagnino, que tuvo su estreno en el Festival de Venecia.
La cinta cuenta la historia de Alma Olsson, una profesora de filosofía de la Universidad de Yale, que está a un paso de obtener la titularización de su puesto, cuando una de sus alumnas tesistas, Maggie, le cuenta que uno de los profesores de la universidad, que es un gran amigo de Alma, la agredió sexualmente.
Alma deberá dirimir entre creerle a su alumna o su colega, al mismo tiempo que esta situación le trae recuerdos de un episodio personal que ella prefiere mantener en la oscuridad.
Cacería de Brujas está protagonizada por Julia Roberts, en el papel de Alma, una mujer que ha tenido que hacer grandes sacrificios para llegar hasta donde ha llegado, Ayo Edebiri, una alumna lesbiana que tiene dificultades para terminar su tesis y Andrew Garfield, un profesor simpático y cercano a sus alumnos.
La cinta ha generado gran polémica ya que para algunos Luca Guadagnino estaría poniendo en duda la palabra de las víctimas, mientras que para otros es una película de una gran madurez que logra abordar un tema complejo introduciendo todas las sutilezas e incongruencias que pueden presentar este tipo de acusación.
Culturizarte tuvo la posibilidad de conversar con el director Luca Guadagnino
Cacería de Brujas es una película que incomoda ya que cambia la narrativa de “la víctima perfecta” ¿Por qué eligio ese ángulo para abordar este tema?
No sé si quería hacer una película que cambiara la narrativa de “la víctima perfecta”. Creo que quería hacer una película sobre la performance, el comportamiento de las personas en un entorno donde la actuación lo es todo, y donde la actuación que interpretan es lo que puede llevarlos a mantener el poder y la responsabilidad.
Usted eligió retratar el conflicto de una “supuesta agresión” sexual en un entorno muy privilegiado tanto económica como intelectualmente, como lo es la Universidad de Yale. ¿Por qué centrarse en este segmento de la población?
Creo que esta película trata sobre la fractura entre ponerse a uno mismo en una posición de virtud y, al mismo tiempo, usar esa virtud para obtener ventajas personales. Y la idea de la educación superior y el privilegio tiene que ver con la forma en que se construye el consenso.
Como director, ¿cómo ha cambiado la forma de hacer cine después del movimiento Me Too?
Creo que en mi trabajo y en mi práctica siempre ha estado en el centro la idea de que, sin importar cuán intenso o tenso pueda ser el rodaje, siempre debe haber respeto para todos, siempre debe haber escucha, y que cada colaborador aporte algo propio a la película. Lo que cada uno aporta es tan importante como lo que aportan los demás. En la práctica, una de las cosas que ocurrieron es la aparición de la figura del coordinador de intimidad, que se ha vuelto cada vez más importante al trabajar en películas donde los actores deben manejar la fisicalidad entre ellos. Es algo con lo que he trabajado y que valoro mucho.
La música tiene un papel importante en la película. Estás trabajando nuevamente con Trent Reznor y Atticus Ross. ¿Podrías contarnos sobre esta colaboración?
Los amo. Creo que son grandes músicos y muy buenos amigos. Nos encanta desafiarnos mutuamente para crear, cada vez, una narrativa musical diferente. Tenemos un método muy abierto y, al mismo tiempo, muy respetuoso. Yo les entrego una película sin música —o al menos sin música en los lugares donde imagino que debería haberla— para que podamos discutir qué queremos y cómo puede evolucionar. Y la otra música, como la brasileña —como Lígia o É preciso perdoar— son canciones asombrosas, profundas y poéticas que nos ayudan a elevar la temperatura moral de la película.
Cacería de Brujas tiene una cinematografía completamente diferente comparada, por ejemplo, con Queer. ¿Podrías contarnos sobre esta elección de director de fotografía, Malik Hassan Sayeed?
Quiero hacer películas que funcionen como piezas individuales, pero que al juntarse formen una filmografía que muestre mi manera de concebir el cine. En este caso, tuve el privilegio de trabajar con un increíble director de fotografía, Malik Hassan Sayeed, con quien soñaba colaborar desde que vi Clockers de Spike Lee en 1996. Se ha establecido como una de las grandes voces de la cinematografía mundial, aunque decidió no hacer películas durante los últimos 25 años. Esta fue su primera película después de ese tiempo. Malik y yo hablamos mucho sobre la idea de una luz que dejara espacio para la oscuridad, una luz dorada que pudiera crear el espejismo del poder que estos personajes perseguían.
Esta es una película que plantea más preguntas de las que responde, y que dice mucho sobre cómo el espectador se posiciona frente a lo que está viendo. ¿Su intención es generar una reflexión en el espectador?
Sí. Por supuesto que quieres hacer una película que permita al público pensar, que les permita formar su propia opinión. No me gustaría hacer una película en la que le diga al público: “esto es lo que es, acéptalo y punto”. Las películas que amo son las que me hacen pensar por mí mismo y me permiten tener mis propias ideas.
Cuéntenos cómo fue el trabajo con los actores, Julia Roberts y todo el elenco de la pelicula.
Fue increíble. Pasamos tiempo ensayando juntos, luego fuimos a Londres y allí trabajamos muy duro para crear un espacio de comodidad para todos y, al mismo tiempo, para que cada uno pudiera superar sus propios límites. Fue muy hermoso de ver.
¿Cómo esperas que el público reciba tu película, dado que hay mucha discusión sobre este tema —el asalto sexual, creerle o no a alguien— y usted no tomas una posición, sino que simplemente lo muestra y nos dejas pensar?
Creo que es maravilloso darle al público la posibilidad de tener su propia opinión sobre las cosas.
Ficha técnica
Título: After the Hunt/ Cacería de Brujas
Género: Drama
País: Estados Unidos
Año: 2025
Duración: 139 minutos
Director: Luca Guadagnino
Elenco: Julia Roberts, Ayo Edebiri, Andrew Garfield, Michael Stuhlbarg
Plataforma: Apple TV
