Por Victoria Abaroa
Promover, exhibir y difundir autorías de mujeres y disidentes sexuales, es la misión de Galería Demoler, en Antofagasta. Ésta fue fundada por Claudia Moreno Pastenes y Fernanda Sánchez Silva después de conocerse en la Feria Ch.ACO de 2022, ambas artistas provenientes de la región de Antofagasta. La galería surgió en 2023 como una segunda etapa dentro del Proyecto Demoler. Esta iniciativa, concebida el año anterior, se originó con la creación de una sala de teatro bajo el mismo nombre, fundada por Claudia Moreno Pastenes junto a un grupo de artistas escénicos.
La galería, al igual que la sala de teatro, viene a suplir una necesidad que se había mantenido insatisfecha hasta el momento. Mientras que la primera iniciativa se presentó como una sala de teatro independiente, la galería apareció para promover la circulación de obras de arte que no encontraban espacios alternativos en los cuales ser exhibidas. Desde su inauguración, la sala expositiva ha albergado exposiciones mensuales, acompañadas de charlas y acciones de arte. Además, parte del registro fotográfico y del vestuario utilizado en algunas de estas iniciativas performáticas se exhibieron en el stand de la Feria de Arte Contemporáneo más importante de Chile, Ch.ACO, incluyendo registros de uno de los proyectos autorales de Claudia Moreno. De esta manera, tanto Claudia como Fernanda han encontrado un espacio de difusión junto a la comunidad Demoler.
Muchas de las obras que están exponiendo en Ch.ACO poseen un carácter performativo ¿Dirías que ese criterio de formato es parte de su línea editorial o ésta se enfoca más en el aspecto temático?
El proyecto nace de artistas escénicos, por lo tanto, lo performativo atraviesa nuestro pensamiento artístico, pero desde una lógica transdisciplinaria. Todas estas obras también han sido expuestas como arte vivo en espacios no convencionales. El alma mater del Proyecto Demoler efectivamente tiene una impronta escénica que irradia hacia otras disciplinas.
Recientemente estuviste exponiendo una muestra en la Galería Demoler respecto al medio ambiente. ¿Me podrías contar un poco más de ese proyecto?
Desde el 2021 estoy desarrollando un proyecto que se llama Trilogía de Sacrificio y que tiene tres partes: Venus en el pudridero, Medusa de sacrificio y Náutica. Para este proyecto, quise salir de la sala de teatro y emplazarme en el paisaje. Elegí Mejillones como escenario, porque es una zona de sacrificio donde existen más de cuarenta empresas industriales, incluyendo las devastadoras termoeléctricas. Esto tiene una serie de implicancias: la predominancia de una lógica extractivista, junto a la miseria que esto genera y la paulatina destrucción de la naturaleza.
Trilogía de Sacrificio fue desarrollada desde el vestuario escénico y nace a partir de investigaciones en el territorio. Venus en el pudridero, por ejemplo, surge a partir de la textura de la espuma sintética que se observa en la costa aledaña a la termoeléctrica en Mejillones, la misma que se observa también en Quintero. Ésta se origina debido a que las termoeléctricas extraen agua del mar a través de conductos submarinos, enfrían sus motores y las devuelven, generando una espuma sintética amarillenta en la costa. A partir de esa textura diseñé este vestuario de cinco metros con el que registré la primera videoperformance protagonizada por la actriz Luz Domic Siede.
Por otra parte, Náutica, que tiene una impronta de tonos más azules, tiene que ver con el cielo y el océano Pacífico, poniendo en valor la vasta naturaleza y su hermosura, en estos grandísimos márgenes del territorio de la Península de Angamos.
¿Tu arte se presenta como una denuncia medioambiental?
Si, y lo he desarrollado a partir de una investigación sensible del territorio. Ha sido un estudio sistemático desde 2021 a la fecha que me ha permitido indagar en los testimonios, texturas y sonoridades de una zona de sacrificio como lo es la región de Antofagasta. Recorrí territorios changos y chilenos, desde Mejillones hasta Calama, pasando por ciudades, pueblos y caletas.
¿El vestuario lo haces tú también?
No, siempre trabajo en equipo, es decir, desarrollo una idea original para luego convocar a artistas realizadoras. Los vestuarios han sido realizados respectivamente por Enya Sánchez, Sailor Villarroel y Kim Berg. Así mismo, el registro fotográfico y audiovisual lo he realizado con D.A.M.R. y Cuarto Gris. Los guiones poéticos que dan vida a los diseños sonoros han sido con la poeta Germana Stieches. Todos somos de Antofagasta y Mejillones.
En el texto acerca de Galería Demoler, incluido en la web de Ch.ACO, se refieren a la intención de visibilizar la experiencia en el desierto, ¿crees que ese concepto se ve reflejado en tu arte personal?
Sí, sin duda. Como autora, pienso el paisaje como un intersticio, un planteamiento que se evidencia en una de las fotografías que expuse en Ch.ACO, que representa un gran farellón costero, donde hay un pronunciado corte entre el desierto más árido del mundo y la costa del Pacífico. Es justo en ese espacio intersticial donde están ocurriendo el extractivismo, la exclusión, la enfermedad y la miseria. Ese es el espacio de resistencia en el que encontramos que se pueden desarrollar lenguajes poéticos que permitan discutir y denunciar, pero también a proponer, generando nuevas perspectivas de desarrollo artístico; pero por sobre todo, de encuentro, reflexión y creación.
Feria Ch.ACO
Centro GAM
21-24 marzo