Por Juan José Jordán
Actualmente el Queen Mary está detenido en el muelle de San Francisco como atracción turística, pero hubo un tiempo en que dominó los océanos. Fuer mucha gente la que viajó en él, a lo mejor atraída por el aura fantasmal que siempre tuvo. No por nada la revista Time ha dicho que se trata de uno de los lugares embrujados más famosos del mundo.
Son dos historias que se desarrollan en distintas épocas. Comienza en el años 1938 con el Queen Mary en mar abierto. Un plano secuencia muy bien implementado nos permite tomar contacto con la confusión que hay en el ambiente. Algo pasa.
Pero el espectador se queda con la duda; saltamos abruptamente al presente donde Anne (Alice Eve) se apronta a hacer una visita turística al barco junto a su hijo (Lenny Rush). Allá se encuentran con Patrick (Joel Fry ), padre y pareja de Anne. Ellos atraviesan una crisis y mantienen un trato distante. Él publicará un libro sobre el pasado del barco, pero Anne quiere convencerlo para que en lugar de ello hagan un recorrido 3D por el barco, haciendo mención a sus leyendas fantasmales. Mientras ella habla con el misterioso capitán sobre su proyecto, Patrick acompaña a su hijo a un recorrido turístico por las dependencias de la embarcación, pero durante el recorrido el chico se pierde por unos momentos y sufre una experiencia traumática. La pareja volverá a ir a los pocos días a terminar el registro para el recorrido virtual, pero el menor se niega a volver. Estos dos hilos narrativos, el pasado y el presente, se irán intercalando constantemente.
Estamos ante una película de terror que busca algo más que el salto de miedo, produciendo una narración intrincada y ambiciosa. A pesar que no consigue el resultado esperado, es un buen recordatorio para tener presente que el terror puede ser tan complejo y de cuidada factura como el mal llamado cine serio. Si no, ahí están las extraordinarias Hereditary (El legado del diablo) o The Shining (El resplandor) como pruebas imperecederas.
Precisamente, las referencias a El resplandor son bastante claras a lo largo de la película. Acá también un hacha tiene un rol crucial y hay una habitación en donde sucedió algo siniestro y todo el ambiente está impregnado de una pátina fantasmal. Pero mientras Kubrick utiliza lo oculto para ir incrementando paulatinamente el miedo hasta dejar al espectador clavado en su asiento, acá asistimos a una carrera de caballo inglés que parte bien y decae al poco recorrido, provocando que sus casi 2 horas de duración se sientan como si fueran 4.
La relación que se establece entre las dos historias es débil. No se logra un trabajo de conjunto que justifique esa forma segmentada en que se desarrolla la narración. Pero además, ambas historias tienen tonos disímiles, la de 1938 tiene una propuesta estética mucho más atractiva y sus escenas generan mayor intriga. Cuando la historia salta al presente y toca ver a la pareja deambulando por los pasillos vacíos encontrándose con algún eventual fantasma, el espectador se impacienta al poco rato y lo único que pide es que algún ente tenga la bondad de liquidarlos y terminar de una vez.
Las soluciones que se dan muchas veces son antojadizas y hasta ridículas. Por ejemplo, cuando Anne está sola en la habitación del barco, algo que sale desde su celular la ataca y por poco la mata. Esto no tiene nada que ver con la lógica de la película. Que sea una película de fantasmas no quiere decir que se puede justificar cualquier tontera, tiene que ser coherente en el marco de la película.
Una película con un buen comienzo que se va desinflando a medida que transcurre el metraje. Su cuidado trabajo estético, la forma realista en que se graficó la violencia y el aura de misterio que se percibe constantemente, no bastan para mantener el interés hasta el final.
FICHA TÉCNICA
Título: La caza del Queen Mary
Título original: Haunting of the Queen Mary
Año: 2023
Duración: 100 min
País: EE.UU
Dirección: Gary Shore
Guion: Gary Dauberman, Gary Shore, Tom Vaughan
Elenco: Alice Eve, Tim Downie, Joel Fry, Nell Hudson, William Shockley, Angus Wright, Jim Piddock, Lenny Rush.
Producción: White Horse Pictures, Rocket Science.
Distribución: Diamond Films