Por Pilar Alcántara
Este documental de la directora, Lorena Zilleruelo, emerge de la admiración a la valentía de su primo menor, y se convierte en una necesidad por filmar y compartir su historia. La cinta comienza con tomas de especies y vegetación cargada de diminutos detalles, pero de magnífica belleza, imágenes que enfatizan el origen de todo ser vivo: la naturaleza.
Si bien la directora busca atesorar recuerdos con este documental, el gran mérito lo tiene el padre de Lorena, quien es el que comienza a grabar videos cortos para saludar a sus hijos que están fuera de Chile, en Francia. Este proceso de grabación y registro de sus vidas cotidianas es invaluable. El trabajo de registrar videos caseros de una familia chilena refleja intereses, vestimentas y costumbres de nuestra cultura en la época de los noventa. Por ejemplo, al verlos reunidos alrededor de la mesa, nos permite apreciar diversas generaciones, bajo una estructura jerárquica y con roles claramente definidos donde la dictadura aún está enraizada y su cultura machista sigue vigente.
Pero ¿Qué sucede cuando hay decisiones que sorprenden a la familia? El cambio de nombre y la decisión de comenzar un proceso de transición de género no solo afecta a quien lo vive, sino la complejidad que implica a nivel familiar, la experiencia para los padres que, además, son un pilar y apoyo indispensable en este tránsito.
Bastián reconoce que es niño y su testimonio es el documental. Hay pocas palabras, pero sus cambios discordantes con su sentir no necesitan palabras, hablan por sí solos. Desde los 12 años siente una disconformidad y su desarrollo le está generando malestar. Sin miedo decide comenzar un tratamiento hormonal con los costos emocionales, sociales, físicos y económicos que implica la transición de género.
En un momento declara que “se siente distintos al resto” y el uso de internet, como medio de información, permite al protagonista comenzar a ver documentales de chicos y chicas trans, experiencia que le ayudó a identificarse, pues sentía que el término trans era apropiado para él. Manifiesta estar harto y querer contar lo que le sucedía con su nombre y sexo registral. Donde el apoyo de la triada familia, colegio y amigos son fundamentales en el proceso. El niño comienza la etapa escolar donde se muestra el enfoque del colegio frente a la diversidad y cómo estos desafíos, de responder de forma asertiva y oportuna frente a las necesidades y sentires de nuestros adolescentes, son de suma relevancia. Este documental es un registro de lo mal que lo hacemos como sociedad frente a estas realidades.
Desde el comienzo del documental se aprecia el pensar y sentir del niño en disonancia con su nombre y rol social. Soy niño es una historia de esfuerzo, perseverancia, valentía y resiliencia que busca dejar de esconder, tapar, mentir, omitir, callar y sufrir en silencio por desvelarse o llorar, como sí tuviera la culpa de algo.
Soy niño sensibiliza al espectador con imágenes de la niñez del protagonista, apreciamos la inocencia de la infancia, escenas conmovedoras donde comprendemos a Bastián. La cinta nos motiva a promover espacios educativos inclusivos y experimentales, que permitan un desarrollo saludable para nuestros niños, niñas y adolescentes.
La invitación es a informarnos respecto a la ley chilena N°21.120 que reconoce y da protección al derecho y a la identidad de género. Atrevernos a compartir experiencias y sentires que eduquen y den la posibilidad de expresarse a quienes lo deseen. Durante el proceso hay hitos en la transición donde se muestra la importancia del acompañamiento de los padres, sobre todo en procedimientos médicos y quirúrgicos dolorosos y trascendentales en el desarrollo de Bastián, y sobre la importancia del deporte como alternativa para generar cambios físicos sin la necesidad de cirugías estéticas.
Ser testigos de la transición de género nos hace empatizar con el esfuerzo, el silencio y dolor, y planteada la pregunta “¿Te olvidas de que eres trans?” Bastián responde “Sí, soy un niño común y corriente”.
Ficha técnica
Título: Soy Niño
Estreno en cines: 13 de abril 2023
Año: 2022
Duración: 62 min.
País: Chile
Dirección: Lorena Zilleruelo
Guion: Lorena Zilleruelo
Reparto: Documental
Compañías: Coproducción Chile-Francia; Capicua Films, Les Films de l’oeil sauvage
Género: Documental
Premios: 2022, Festival de Gijón: Sección oficial (Tierres en trance)
Distribución: La Distribución