Por Vanessa Vidal Durán
Viaje al cuarto de una madre es la ópera prima como directora y guionista de largometraje de Celia Rico Clavellino, quien realiza un retrato íntimo de una relación madre e hija. Ha recibido nominaciones y premios, como la mención especial del Premio Kutxabank- Nuevos Directores en el Festival de Cine de San Sebastián, y el Premio Asecan Mejor Película, otorgado por la Asociación de Escritores de Cine de Andalucía (Asecan). Película española que llega a Chile gracias al sitio online de Cinemark.
Estrella (Lola Dueñas) es madre de Leonor (Anna Castillo). Viven en un departamento donde comparten íntimos momentos, como dormir siesta, ver series, abrazarse para año nuevo, ambas en el sillón luego de comer granos de uvas. Estrella es costurera y Leonor trabaja planchando en una especie de fábrica de ropa; sin embargo, necesita y busca algo nuevo: ir a Londres a trabajar al cuidado de niños en una familia. Viven el luto del padre, no obstante pareciera que a Estrella le es más difícil continuar la vida con la pérdida. Razón que hace que Leonor tema proponer este cambio de vida a su madre. Ambas deberán hacerse cargo no solo ahora de su relación, sino de sus propias vidas.
Viaje al cuarto de una madre crea una impresionantemente creíble relación madre e hija. Acierto de casting que tiene un excelente trabajo en la dirección, que traspasa la pantalla. Es la intimidad en la naturalidad de la relación entre ellas, y sus actuaciones, lo clave de la película. Esto en conjunto con la relación que tienen ellas y el relato mismo con los objetos y decorado, como lo son el encuentro de las cosas del padre, la comunicación a través de celulares y compartir en el bendito sillón, por nombrar algunos.
El concepto de intimidad es reforzado por la cinematografía que, con cuidado, nos muestra a los personajes, sus sentimientos y acciones, acercándonos a sus mentes y corazones, debido al tamaño de planos y sus composiciones. Esta naturalidad misma en la dirección de arte trabaja austeridad como así también humanidad, dando vida y utilidad a lo que usan, también donde se desenvuelven nuestras protagonistas.
La película en su duración posee numerosos momentos de soledad. Esta soledad no solo se practica con un individuo solo en un espacio físico (que lo tiene), sino también en compañía. Tanto Estrella como Leonor sienten soledad en su alma, pero también tienen una cuerda (esperanza) que tirar para salir de ahí y tomar el control de sus vidas. Estos momentos, que son muchos, generan en ocasiones un agotamiento. El ritmo es bastante lento, pero se justifica por la temática y narración particular. Observamos el ritmo de sentimientos en muchas acciones; observamos el silencio, y pertenecemos a él.
Es la auténtica relación, que al fin de cuentas nos permite reflejarnos a nosotros mismos ya sea en la soledad, en la relación con nuestras madres, o cosas que tengamos por ahí en la vida no resueltas. Si llegas a la última escena da para pensar. ¿Ya llamaste a mamá hoy?
Título: Viaje al cuarto de una madre
Dirección y guion: Celia Rico
Reparto: Lola Dueñas, Anna Castillo, Pedro Casablanc, Noemí Hopper, Marisol Membrillo, Susana Abaitua, Ana Mena, Silvia Casanova, Adelfa Calvo, Maika Barroso
Música: Paco Ortega
Dirección de fotografía: Santiago Racaj
Dirección de arte: Mireia Carles
Montaje: Fernando Franco
Música: Paco Ortega
Productora: Co-production España-Francia; Amorós Producciones, Arcadia Motion Pictures, Canal Sur Televisión, Noodles Production, Pecado Films, Sisifo Films AIE, Televisión Española (TVE)
Género: Drama
Duración: 94 minutos
Año: 2018
País: España
Distribución: Arcadia Films
Plataforma: Cinemark