Por Carla Alonso
“Cuando a sesión de calmo pensamiento
convoco los recuerdos del pasado
la pérdida de antaño es lo que siento
y el tiempo agoto en un pensar gastado;
se arrasa mi ojo, casi siempre enjuto
por amigos sepultos en la noche,
lloro otra vez con revivido luto
de esfumadas visiones el derroche.
Puedo llorar por penas transcurridas
de pena en pena, así, pesadamente,
contar series de penas ya gemidas
por las que ahora pago nuevamente.
Pero cuando en ti pienso, buen amigo,
todo lo encuentro y el penar mitigo”.
El soneto 30 de William Shakespeare -traducido por Miguel Ángel Montezanti-, se convertirá en una suerte de mantra durante la hora, hora y media, en que transcurre By Heart: la obra de teatro del director, dramaturgo y actor portugués Tiago Rodrigues -nacido en Lisboa, en 1977-, que fue parte de la programación internacional del Festival Santiago a Mil.
La elección del soneto no es casual. Es el último texto que Cándida, la abuela de Tiago Rodrigues, memorizó cuando a los 94 años comenzó a perder la visión y los médicos le recomendaron no seguir leyendo. Fue un golpe muy duro para Cándida y ahí llamó a su nieto actor, Tiago, y le pidió un favor: que le llevara un buen libro que pudiera aprender de memoria. Así llegó a sus manos una recopilación de los sonetos de Shakespeare.
Este trozo de la biografía de Tiago Rodrigues da vida a By Heart, un montaje minimal en la puesta en escena, desprovisto de los elementos que estamos acostumbrados a ver en el teatro, como juego de luces, música o escenografía.
Al ingresar a la sala del Teatro Finis Terrae la obra ya ha comenzado, con 10 sillas de madera -de distintas épocas y estilos-, dispuestas en forma de medialuna sobre el escenario. Al centro, tres cajones de fruta repletos de libros usados y Tiago Rodrigues, vestido con una polera blanca con la cara estampada -por delante y por detrás- de escritores a los que citará, jeans y zapatillas blancas. Sentado en un piso al centro de la medialuna, lee, repite en voz baja y observa al público, mientras los espectadores se acomodan en sus butacas.
En un español casi perfecto, el director llama a 10 voluntarios que se transformarán en co-protagonistas. “Estas 10 personas no tendrán que hacer teatro. Yo también soy alérgico al teatro interactivo y no voy a manipular a estas 10 personas”, aclara, entre las risas del público.
El reto de quienes lo acompañan, cual soldados en escena, es aprender de memoria el soneto 30 de Shakespeare. Pero no sólo de memoria. La expresión By heart, explicará más tarde, si bien se traduce del inglés como “de memoria”, hace referencia a algo más poético, algo apendido con el corazón. “Saber de cor, en portugués, o savoir par coeur, en francés”, explica el director, saltando con naturalidad y sutileza de un idioma a otro.
Y es que Tiago Rodrigues habla portugués, inglés, francés, español, holandés y está aprendiendo croata. Si bien el texto de la obra es el mismo, hace guiños locales y los realiza en esos idiomas.
Su hoja de vida dice que comenzó su carrera hace más de 20 años, con el colectivo teatral belga tg STAN. En 2003 fundó la compañía Mundo Perfeito, con Magda Bizarro, quien está a cargo del diseño de escena, accesorios y vestuario de By Heart.
Tiago Rodrigues ha escrito guiones para películas y televisión, artículos en diarios, poesía y ensayos. En 2018 recibió el XV Europe Prize Theatrical Realities. Desde 2015, es director del Teatro Nacional Dona Maria II, en Lisboa. El año pasado, el diario español El Mundo lo definió como “la gran sensación del teatro luso”.
El director y dramaturgo se luce también como actor: lleva este ejercicio teatral sobre el poder de la memoria hacia adelante, en un relato que conmueve, sorprende y es divertido a la vez, en el que va alternando las cartas que le escribió al gran filósofo y ensayista George Stainer, contándole de su abuela Cándida; las citas que recita de memoria de Fahrenheit 451, de Ray Bradbury; a la vez que ayuda a los participantes -con la corporalidad y gestos de un director de orquesta- a memorizar los versos que forman el soneto de Shakespeare.
By Heart tiene que ver con el texto dentro del texto, con las asociaciones entre la realidad y la ficción, pero sobre todo con la memoria: no sólo enseñar un poema y lograr que el grupo lo recite al final de la obra, sino salir al rescate de la memoria en sí, de la historia de su abuela, y convertirla en un montaje con el que se ha presentado en el prestigioso teatro parisino Théâtre de la Bastille, en 2014, y en el Festival de Otoño a Primavera, en Madrid, en 2016, entre otros.
Hay un punto interesante en la apuesta de Tiago Rodrigues que trasciende el ejercico de la memoria. A ratos, sobre el escenario, su performance coquetea con el stand up comedy y exhibe sus tremendas capacidades actorales transitando de las citas de libros al humor, y viceversa. Juega con el público, lanza chistes, responde, interpela, y bromea a los participantes a su lado.
Como el público siempre cambia, uno puede imaginar que By Heart es distinta cada función. “La obra no empieza hasta que no tenga los voluntarios… y podemos estar tres horas acá”, bromeó el director al inicio del montaje.
El final de obra es sorprendente y uno de los momentos altos del montaje: Tiago Rodrigues propone al grupo de voluntarios que “se coman literalmente a Shakespeare”. En escena aparecen todo tipo de reacciones: algunos lo miran incrédulos, otras ríen nerviosas y repasan los versos que minutos después recitarán de memoria, pero con el corazón.
Como dice la reseña en la web de Santiago a Mil (https://www.santiagoamil.cl/obras-2020/by-heart/), “la obra pone en valor la importancia de la transmisión oral, en tiempos en que aprender algo de memoria parece inútil frente a celulares y computadores capaces de almacenar infinidad de datos y de recordarnos lo que no podemos (o queremos) retener”. Y cita a Tiago Rodrigues: “Como lo dijo George Steiner en una entrevista al programa Beauty and Consolation: ‘Una vez que diez personas aprenden un poema de memoria, no hay nada que la KGB, la CIA o la Gestapo puedan hacer. Sobrevivirá’”. “By Heart es un programa de entrenamiento para la resistencia que solo llega a su final cuando diez nuevos soldados saben un poema de memoria”, ha señalado el director.
BY HEART
Ficha artística:
Dramaturgia, dirección y elenco: Tiago Rodrigues
Diseño de escena, accesorios y vestuario: Magda Bizarro
Producción ejecutiva: Rita Forjaz
Producción ejecutiva de la creación original: Magda Bizarro y Rita Mendes
Una producción del Teatro Nacional D. Maria II, de Portugal, a partir de una creación original de la compañía Mundo Perfeito, con el apoyo financiero del Gobierno de Portugal-DGArtes
Coproducción: O Espaço do Tempo, Maria Matos Teatro Municipal