Por Estefanía Retamal
La cualidad de la moda de trascender en los diversos ámbitos de la sociedad, la convierte en un punto donde pueden converger la filosofía, el arte y la historia.
La casa de modas: hijas de la libertad (2020) es el mejor ejemplo de aquello. La autora, Julia Kröhn (Austria, 1975), quien con anterioridad ha ocupado diversos seudónimos, nos conduce, de la mano de tres protagonistas femeninas, por los más álgidos puntos del siglo XX, bajo el manto de los tejidos, los sombreros, tiendas de corsés y de alta costura.
Cada una de esas mujeres se verá ante la difícil tarea de librar, cada una en su tiempo, la batalla contra las imposiciones sociales, y enfrentarse a un mundo patriarcal que busca limitarlas al espacio del hogar. En contextos en que las guerras y revoluciones cambian el orden de las cosas y la sobrevivencia se hace imperiosa, los tres personajes toman las adversidades como una oportunidad de reinventarse y redescubrir su identidad como mujeres en un entorno que parece estar dominado por el caos.
Durante 1914 en Fráncfort, conocemos a Fanny, una joven que desde pequeña demuestra su interés por una moda que no fuera opresiva con el cuerpo femenino, sino que les diera libertad: “como para poder jugar al tenis”. Bajo este pensamiento sueña con Paris y con tener su propia tienda, alejada de los represivos corsés que vende su madre. Fanny demuestra ser una mujer con determinación, que nunca deja que sus deseos flaqueen, ni siquiera por una idea romántica del matrimonio.
En 1944, finalizando la Segunda Guerra Mundial, conocemos a Lisbeth, la hija de Fanny, que tiene un gran resentimiento hacia su madre. Lisbeth piensa que Fanny es una mujer egoísta e individualista, a quien no le importó abandonar todos sus deberes con su familia por anteponer sus propios deseos. Y es que a Lisbeth le toca la difícil tarea de tener que sacar adelante a sus hijos mientras su marido está desaparecido en el frente, por lo que toma la decisión de reflotar la casa de modas Konig, heredada de su padre. Moda y linaje se entretejen en la vida de esta mujer, quien se dará cuenta de que no es bueno cargar con demasiados secretos.
En 1971 conocemos a Rieke, nieta de Fanny e hija de Lisbeth. Rieke se plantea como el personaje más interesante. Es una mujer que, en lugar de ir contra todo lo establecido como habían hecho sus antepasadas, se deja dominar por los convencionalismos de su época, en oposición a su hermana, quien se muda a Paris y participa activamente en el movimiento hippie. Sin embargo, Rieke se encuentra en una situación que la hace replantear su vida y su dependencia, cambiándola de forma drástica.
Estas tres historias se entrelazan no solo por la sangre, sino también por la presencia constante de un cuarto personaje, la tía Alma, cuya lucha y conocimientos feministas se convierten en el motor que logra hacer partir a Fanny, mantener unida la familia de Lisbeth y reconectar a Rieke con su pasado.
En La casa de modas, Julia Kröhn logra entender perfectamente que el imaginario femenino es capaz de contener tanto la vulnerabilidad como la fuerza, el amor y la desilusión, la creatividad y la terquedad. Es así como nos entrega una historia llena de emociones contadas en una prosa sencilla y clara, a la vez que nos enamora y nos hace querer conocer el desenlace de estos destinos tejidos a mano.
Título: La casa de modas
Autor: Julia Kröhn
Editorial: SUMA
Fecha publicación: 2020
Idioma: español
Número de páginas: 512
Encuadernación: Tapa dura
ISBN: 9788491293286
Edad recomendada: adulto joven, adultos
Editorial: Penguin Random House