Entrevista a protagonista de “La Ira de Narciso” Freddy Araya: «Esa mirada narcisista es súper interesante en la manera en que uno puede usarla para poder derivar en la empatía»

Por Galia Bogolasky

La ira de Narciso propone una historia de suspenso con múltiples capas narrativas que aborda temas como la función del arte, la soledad, la sexualidad, la adicción, la desesperanza y la belleza. Escrito por el dramaturgo uruguayo Sergio Blanco, este monólogo dirigido por Soledad Gaspar se está presentando en GAM.

Un relato en primera persona sobre la estadía del autor Sergio Blanco en Eslovenia, sirve de hilo conductor en un montaje que se convierte en una suerte de laberinto que superpone distintos niveles de autoficción, donde capa por capa se irá revelando una radiografía del ser humano que mantiene el suspenso hasta el final.

En La ira de Narciso, el escritor es invitado para dictar una conferencia magistral sobre el célebre mito de Narciso, y mientras hace los últimos preparativos de su ponencia, se van revelando los distintos encuentros que el autor mantiene en su habitación de hotel con un joven esloveno que acaba de conocer por una aplicación de citas. La historia sufre un giro con el descubrimiento de una mancha de sangre en el suelo de la pieza, por lo que el relato irá dando lugar a la reconstrucción de un asesinato donde es el propio narrador quien lo revive.

Esto fue lo que el protagonista de la obra nos contó

Esta es la segunda temporada que se realiza de esta obra La Ira de Narciso. Primero tuvieron una temporada en el Mori Recoleta y ahora en el GAM. Es un unipersonal donde tú vas relatando, cómo fue que llegó este texto a ti, el texto del dramaturgo Sergio Blanco. La obra juega con todo lo que es la autoficción del autor y cómo lo vas traspasando ¿Cómo ocurrió realmente la llegada del texto Sergio Blanco a ti?

Quería agregar que tuvimos un fin de semana de función en el Teatro Regional del Bío Bío, que estuvo. increíble. Recordar que tú fuiste una de las primeras que se interesó por el trabajo de Sergio Blanco, cuando hace algunos años hicimos Tebas Land. Así que feliz de volver a hablar contigo sobre Sergio Blanco de nuevo, después de tantos años. Originalmente esta obra Sergio se la escribió a su gran amigo Gabriel Calderón, que es un dramaturgo uruguayo que a mí me gusta mucho. Sergio tiene esas esas cosas que son tan especiales, tan de él, de alguna manera, que esta autoficción sea realmente a partir de una realidad, que no sea tan ficción todo. Entonces el hecho de La Ira de Narciso, este traspaso a mí, tiene eso de realidad, porque si tú te acuerdas cuando hicimos Tebas Land con la Lux Pascal, con Lucía de la Maza y Soledad Gaspar, Sergio Blanco vino a ver una función aquí en el mismo GAM. Yo estaba aterrado. El autor viene, viajó de Francia a ver la obra, uno ya venía antecedido por esta fama de ser muy aprensivo, de muy cercano a sus obras, porque cuando uno ve en sus redes sociales, sube fotos de los actores que están haciendo su obra, dónde se está produciendo, entonces está muy encima de los procesos o de lo que está pasando con su trabajo, lo que está muy bien. Vino a ver la obra y fue muy amable él con su percepción de la obra, fue muy simpático. Al otro día con todo el equipo, nos juntamos, almorzamos con él y tuvimos muy buenos comentarios de su parte.  Después él me dice que me va a mandar un texto que me gustaría que leyera, que quisiera que yo hiciera, y justamente era La Ira de Narciso. Entonces efectivamente ahí hay un hecho concreto que Sergio nos pasó la obra para que la hiciéramos, originalmente iba a estar la Lucía de la Maza, pero migró. Afortunadamente Soledad Gaspar asumió el desafío de la dirección. Entonces, esta autoficción es bastante cercana a mí, yo hablé con Sergio. No somos amigos cercanos, pero a veces nos intercambiamos algunas palabras, algunas cosas, mensajes. Las veces que él ha venido a Chile, nos hemos visto, es muy generoso con su trabajo. Sergio me dijo hagamos este proyecto juntos.

¿Cómo fue cuando ya te llegó el texto y lo leíste? ¿Qué te llamó la atención? ¿Qué te pareció atractivo? ¿Sentiste que estaba conectado con sus textos anteriores o con Tebas Land? ¿Qué fue lo que te pareció atractivo de este texto en particular?

A mí me parece que este texto tiene más capas que Tebas Land. Siento la misma línea de la autoficción y todo trabajando con la representación. De hecho, para mí, cuando me preguntan ¿qué estás haciendo? ¿Estás haciendo un monólogo? Es difícil responder a eso, porque hay una parte del texto que Sergio dice: “Esto no es un monólogo, ni un soliloquio, ni un unipersonal, es un relato”. Entonces  es raro si estás haciendo un relato, con más gente, es un monólogo. Lo que me gustó mucho y que todavía me sigue gustando del texto es que tiene muchas capas. Capas temporales, capas de significados y capas de ficción, que siento que se aleja un poco de Tebas Land, porque además es mucho más emocional. Yo creo que aquí es más abierto con la emoción, con esta cosa del deseo, de la curiosidad. Siento que Tebas Land era un poco más un entrevistador, que te tomaba un lugar más objetivo. Aquí él es mucho más protagonista de la historia. Las cosas le suceden a él directamente. No es un narrador que está contando las cosas que le suceden a otra persona. Aunque acá en este caso Sergio usa a Freddy Araya para narrar lo que le pasa a él. Este juego es muy interesante, porque al principio dice : ¿Cómo es esto? Pero  bien. Va tirando miguitas que después se van amarrando a lo largo y eso me parece a mí la complejidad. Entonces uno va hacia atrás, va hacia adelante y ahí va atando cabos de lo laberíntica que tiene. A mí me parece súper interesante, es un Rubik que uno va armando. Además Sergio trabaja en varias líneas, la autoficción, que es como diría un estilo de escritura dramatúrgica, pero va instalando temas, que además lo hace desde un lugar, en donde uno puede mirarlo desde una ironía o realmente tomarse en serio. Toda esta teoría que instala de la comparación del mito de Narciso con la mirada del artista es muy real, pero también se puede estar riendo de las y los teóricos que plantean unas teorías estrambóticas con respecto a ciertas cosas que son casi evidentes. También le da una vuelta que es interesante, desde los dos lados, es interesante si me lo tomo muy en serio, desde la academia, y es interesante si lo tomo como una ironía, ¿De qué me estás hablando?. Me parece interesante porque este texto es de hace varios años atrás, entonces es que está hablando desde un futuro, porque el tema que nosotros vemos ahora como el avance de la extrema derecha, los partidos de islamófobos, homófobos, hablando de los problemas de la migración, de estos migrantes que naufragan en las costas de Italia y a nadie le importa nada. Para nosotros era un futuro, y él venía del futuro, hablando para nosotros de ese futuro. Cuando yo leí este texto, ahora es una realidad, cuando dice: “Entonces miraba un documental y sobre el calentamiento global y no había nada que hacer, el derretimiento de los glaciares era algo inevitable”. Lo estamos viendo día a día. Entonces esas cosas a mí me sorprenden, esa cosa del oráculo. Hay un tema que viene con las redes y todo el uso de las redes para los encuentros, lo toma como una fantasía, la de construir su propia fantasía de cómo gustaría que funcionara. A lo mejor sí, a lo mejor no, pero puede ser una fantasía con este personaje que es una belleza y está obsesionado con él, que es una fantasía muy egocéntrica y narcisística, de encontrar, imagínate una persona que es espectacular, un modelo y era hermoso y lo sabía, lo sabía mejor que nadie y que además te ha obsesionado contigo. Entonces tiene ese humor que a mí me parece muy interesante. Las veces que he abordado el texto, encuentro capas nuevas y es mucho más fácil de ir habitando esos espacios del humor, de la ironía, de la complicidad, porque tiene esta relación con el público, una relación que puede ser muy directa, una relación indirecta, donde el público es interpelado, donde el público es espectador. Entonces el juego que él hace con esta dramaturgia me parece súper interesante. Siempre es un desafío encontrar el tono, porque es lo que a mí más me daba susto al principio, cómo abordar este texto que es tan largo, originalmente duraba 1 hora 40, es tan largo un solo performer en escena, haciendo esto sin nada más que el texto, su cuerpo y su presencia, es difícil. Uno inevitablemente piensa en cómo va a reaccionar el público con eso. El tono, porque Sergio es súper claro en eso. A Sergio no le gusta mucho la “actuación”, como que él tiene un poco de fobia con esas cosas, de estas interpretaciones muy teatrales, pero uno le da un juego más teatral para que no sea como “Hola” un relato así muy plano. Entonces yo creo que ahí la Soledad Gaspar, junto al equipo creativo de Damián Noguera en la música, y en las proyecciones, y Espacio Checoslovaquia, la iluminación, le dieron un apoyo importante para crear una atmósfera, para que no sea solo texto.

La obra tiene humor, tiene drama, tiene misterio, tiene suspenso, tiene thriller, tiene una parte súper intelectual, toda la base de la conferencia conjugado con esta aventura romántica, con Igor, mezcla hartas capas que genera un ritmo en el relato que encuentro que funciona impresionantemente bien. Va conjugando, lo más como personal con lo más universal, mezcla muchas cosas todo el tiempo. ¿Cómo fuiste abordando esos diferentes tonos durante el transcurso de la obra?

La dirección es fundamental, porque uno a veces aborda las cosas desde un lugar totalmente distinto, y aparece como que la directora dice: “Freddy, yo creo que esto es más liviano”. Yo siento que no es tan liviano, que a veces había algunas partes que para mí eran súper tristes, que incluso me emocionaba, eso puede ser divertido, pero ¿cómo va a ser divertido esto? Sergio se siente como un poquito sacrílego, cuando dice por ejemplo: “Traté de masturbarme, pero la imagen de mi madre con Alzheimer galopante”. ¿Entonces por qué lado lo abordo? Porque efectivamente pero nada es tan ajeno a uno, porque a uno a veces se le cruzan las cosas. Entonces desde ese lugar, yo creo que el relato, para poder abordar justamente todas estas capas, uno tenía que ir como desmenuzando. Este es el académico, el catedrático que está dando la charla, y de verdad se lo toma en serio. Para él es una teoría que él la cree, una postura que es así, entonces ahí está el catedrático, entonces está el tono de este que está explicando su teoría, siendo súper claro con su tesis, una tesis que para él es muy relevante y por algo lo invitaron a la facultad de filología de Llubliana. Yo lo siento desde ese lugar, tiene que afirmarse y creer lo que uno está diciendo para poder transmitirlo a les estudiantes. Por otro lado más juguetón, como desmenuzando el personaje de Sergio; el serio, el juguetón, el que tiene encuentros, el que le da lo mismo hablar: “Hoy conocí a un chico en Tinder”, el que se ríe un poco de la academia. Hay que descubrir a ese Sergio, inventando, no lo conozco tanto como para decir Sergio tiene todas estas facetas, pero inventando en él las cosas que yo veía como que podían ser sus facetas de cómo sería este personaje, un personaje más lúdico, un personaje más erotizado, un personaje que se droga, un personaje que viene saliendo de rehabilitaciones. Es un personaje que, además, es parte de un círculo de pensadores, de académicos, del círculo intelectual europeo. Además es un personaje que tiene una vida personal, tiene una familia, una madre con Alzheimer, unas hermanas, con la cual tiene que conversar sobre cómo se van a acercar a este tema, del Alzheimer de su madre. Entonces son varios Sergios, que finalmente es la vida de uno, y en algún minuto uno es así, es asá, y a veces todo junto y se ríe un poco de todo, le parece terrible, a veces parece divertido. Pero había que desmenuzar justamente todo esto, estos personajes, para instalar ciertas líneas, para que si bien es cierto, es un relato, no actúa tanto, no lo caracteriza, por lo menos tener una postura frente a cómo abordar ciertas situaciones. Entonces vamos desmenuzando, esto es así, este es el que así. Después las capas se van soltando un poco más, pero siempre hay como uno puede notar creo ciertas diferencias, entre este que es más coqueto, que cuando aparece el amante se le pasan cosas, lo desea y este deseo erótico que tiene por la imagen de Belmondo. Yo creo que como no caracterizándolas, pero sí están presentes en cómo se instala el texto.

Cuando te metes en el personaje, ¿hay algo tuyo que conecta con él, te sientes identificado con él?

Yo me siento súper cercano, lo entiendo de verdad. No somos amigos, pero he conversado varias veces con él, he estado almorzando con él, él he estado en reuniones de camaradería. He leído varios textos, he visto su montaje acá y todo. Lo he visto en distintas situaciones y siento que empatizo con él. Además que las cosas que le pasan, las cosas que él va contando, siento me podría pasar eso. A lo mejor no estuve las clínicas de rehabilitación, pero ¿quién no tuvo un coqueteo con la droga o una pasada por la droga en el tiempo? ¿Quién no se ha instalado en una aplicación ya conocido a alguien así? O ¿Para quién ha sido una fantasía conocer un super sex symbol? Son todas esas cosas que están en uno. No lo siento para nada ajeno, no hay nada que me parezca ajeno. Lo más ajeno obviamente es esta pertenencia a un círculo intelectual, obviamente. Yo creo que lo que él hace, una de las cosas políticas súper relevantes que me saltaron del texto es justamente esta inacción desde el grupo, desde el sector más intelectual, que yo lo veía para la época de la revuelta en Chile. Todavía lo sigo sintiendo, siento que la clase política que está muy desprestigiada, está muy agotada, en el sentido de temas, de miradas, no aparece la intelectualidad chilena. Yo siento que hay un grupo de intelectuales que tienen mucho que decir sobre pensar el país, hacer una radiografía del país, ¿dónde están? Podemos decir por muchas cosas, la prensa, la comunicación, visibiliza otras cosas, y el trabajo. No lo siento presente, no siento que alguien esté hablando de sociología, de temas de economía, de temas de política, pero políticas de la academia. No sé qué ha pasado. Cuando Sergio hace esa crítica dice: “Nadie decía nada sobre las balsas de migrantes”, en eso se haya convertido el círculo intelectual europeo. Yo siento que acá ha pasado lo mismo. Eso para mí era políticamente súper relevante que está en el texto.

Hay una frase que me parece súper interesante, que es la que se planteaba al comienzo de la obra, que es la Rimbaud, que dice que es una frase típica del tema del otro “yo soy otro”. Es la base de la obra y que tiene que ver  con el tema del mito del narciso. El tema del narcisismo es un tema que nos rodea constantemente, que nos hemos encontrado como sociedad hoy en día, como con estos personajes súper narcisos, con figuras públicas. ¿Cómo conectas el tema político que aborda la obra, con este punto de partida que es el tema del yo no soy este otro, en base  al concepto de la obra del Narciso?

Está buena esa reflexión que tú haces, porque efectivamente yo creo que lo que él plantea es muy real, en la medida en que muchas veces el ejercicio artístico tiene que ver con cómo a uno le pasa que uno busca, uno se mira a sí mismo para ver cosas que tienen de los otros, o están en los otros, que es una mirada a través de uno para encontrar un otro, como dice Sergio. Lo que pasa es que esto de mirarse a uno mismo es interesante, siempre y cuando uno se quede en ese narcisismo como perpetuo de yo mirarme a una pantalla o una foto que se queda ahí para siempre, o tener la pantalla de cuando era joven y de tener ahí la foto para siempre, y quedó siempre ahí. Yo creo que ese ejercicio narcisístico es interesante cuando va más allá de uno, como que me miro a mí mismo, pero a partir de esa observación puedo entender muchas cosas y puedo llegar a un proceso de empatía, que yo creo que para mí sería el siguiente paso de este narcisismo, como una búsqueda de mirarse todo el tiempo a sí mismo, analizarse, revisarse, espejearse, como decir “wow, soy así, esto soy, esta soy”. Después de eso poder entender a los demás desde ese lugar, porque yo soy una persona y tenemos condiciones humanas parecidas, entonces entender al otro y desde ese lugar se puede producir un diálogo. Esa mirada narcisista es súper interesante en la manera en que uno puede usarla para poder comprender y entender al resto, derivar en la empatía. La otra teoría que tiene que ver con la transformación de las cosas es súper interesante, porque es muy real, tu los sabes, conectadísima con el tema artístico y conoce los procesos, sabes que uno evidentemente instala ciertas cosas, como mira en esto es un bosque, yo estoy mirando un bosque, entonces yo te convenzo a ti de que estoy mirando un bosque, tú con tu mirada estás mirando un bosque . Y eso es una mirada. La transformación de que Narciso transforma en otra cosa, a veces son un poco forzadas, pero evidentemente hay algo de verdad. Esta cosa de la inmortalidad a mí me parece brutal, sobre todo cuando dice que las y los creadores. Yo creo que todo el mundo, de plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo, como de perpetuarse y eso es narcisista, como de ir naciendo siempre en otra cosa que, como quedar ahí eternizado por este miedo a morirse. Cuando dice que Sergio en su texto, que para mí es una frase como emocionante. “Yo creo que es una de las funciones del arte, de suspender por un instante ese miedo a morirnos que tenemos todos”, porque nos quedamos ahí suspendidos en algo que está mucho más allá de nosotros, que se va a detener en el tiempo. Cuando tú vas a un museo y viste toda la vida La noche estrellada de Van Gogh, y la viste desde chica en la lámina, después llega un momento, vas a Nueva York y la ves en el museo y ves la eternidad en eso. Eso es maravilloso del arte. Eso va a estar siempre, ha pasado generaciones. Eso venció a la muerte. Entonces esa esa relación con esas cosas a uno más allá de ser narcisista, te devuelve una cosa como ¿sabes qué? No soy tan relevante, mira este cuadro está aquí y todas las cosas que han pasado, guerra, hambruna y todo lo que ha pasado en el mundo después de esto, imperios que han caído, gobiernos que han caído, dictaduras y ese cuadro sigue ahí, yo también voy a pasar. Esas cosas que tiene Sergio dan para conversar largo. La gente puede tener opiniones diversas, pero a mí justamente lo que me pasa con este texto, que yo creo que da cada reflexión, es una hebra que abre, abre más y más cosas. Te lo puedes tomar de una manera muy liviana, reírte y pasarlo bien y que sea un thriller. Es un trabajo interesante lo que hace.

¿Qué le podrías decir a la gente para invitarla a ver la obra esta temporada en el GAM?

Que vengan. Estoy muy agradecido con el público, porque me ha tocado público de todas las edades, parejas, gente mayor, gente muy joven y todo el mundo viene con esta idea, esta curiosidad y se encuentran con un relato que de alguna u otra manera, van a entrar por el relato de la historia ¿qué va a pasar con esto? Es una historia que va avanzando como si fuera una serie de Netflix, como que quieres ver el próximo capítulo. ¿Qué viene ahora? Son 75 min. Además está acompañado de un trabajo de diseño que está muy interesante. Es un trabajo bastante sobrio y que van a encontrar en algún punto pasos de reflexión, de entretención y de muchos misterios, de ganas de resolver un misterio, de qué está pasando ahí. Van a ir seguramente acompañándome en este relato para ir atando cabos juntos y sacando sus propias conclusiones. Lo van a pasar bien todo el rato, vamos a estar ahí muy acompañados, acompañades, así que vengan al GAM. Están invitadísimos.

Ficha técnica

Título: La ira de Narciso

Dramaturgia: Sergio Blanco

Dirección: Soledad Gaspar

Intérprete: Freddy Araya

Diseño sonoro: Damián Noguera

Diseño Audiovisual: Gomár Fernández

Diseño Lumínico: Espacio Checoslovaquia

Producción: Coproducción de Espacio Checoslovaquia y la compañía. Patrocinan: Festival Santiago Off, Centro de residencias Nau Ivanow (Barcelona, España).

Jefe Técnico: Rodrigo Leal

Sonido: Juan José Acuña

Coordenadas

25 Abr al 5 Mayo. Ju a Sá — 21 h, Do — 20 h

$5.200 Preventa Gral., $8.000 Gral., $6.000 Estudiantes y Personas con discapacidad, $5.600 Personas mayores y promo “domingo de teatro”

 

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *