Entrevista al director de «Dinosaurios en mi ventana» Daniel Marabolí: «Lo que puede hacer el teatro es gatillar imaginación»

Por Galia Bogolasky

Entrevistamos al director de la obra Dinosaurios en mi ventana, un proyecto sonoro-performático que busca poner en ejercicio el texto de Raúl Riquelme, galardonado en la muestra de dramaturgia Delirios en Cautiverio organizada por el Teatro Nacional Chileno, el año 2020.

Protagonizada por Rodrigo Pérez, es una invitación a una experiencia fundamentalmente sonora, que pone en escena a una voz que revisita su memoria y la memoria de los asuntos que lo rodean. Una voz encerrada que anhela saber si los dinosaurios que lo visitan en su ventana son un signo de la inminente extinción humana.

Daniel Marabolí, reconocido por su trabajo en la experimentación sonora y performática, lidera un montaje que transforma la voz en el eje central de la puesta en escena. En el espacio, un personaje dice ver dinosaurios asomados en su ventana, guiando a la audiencia por un recorrido coreográfico-sónico de las múltiples voces que habitan en su interior, y en donde ve a esos dinosaurios como un signo para preguntarse sobre su identidad, su memoria y la inminente extinción.

Esto fue lo que Daniel Marabolí nos contó

Dinosaurios en mi Ventana es un montaje súper especial, que mezcla el trabajo sonoro y la performance, con el teatro y varias disciplinas. Cuéntame ¿cómo surgió este proyecto?

La génesis del proyecto fue de Raúl (Riquelme). Él escribió este texto en el 2020, Delirios en cautiverio, que hizo el Teatro Nacional Chileno. Él lo envió y quedó seleccionado en esa dramaturgia.En el 2023 coincidimos en un proyecto con Raúl y me invitó. Dijo: “tengo este texto. ¿te gustaría dirigirlo?” Lo leí y me pareció súper poético y muy simple. Otra cosa que me gatilló es que era un monólogo, y yo llevo mucho tiempo trabajando con la voz y el sonido, entonces pensaba que esta voz que le ponía Raúl en su texto podría ser una voz que trabajaba sonoramente. De hecho, apenas leí su texto, el primer impulso que tuve fue, con sus palabras, con su forma de escribir, fue absolutamente sonoro. Entonces le dije: “Sí, démosle, hagamos esta alianza” Escribimos juntos el FONDART para postular. Nos adjudicamos el FONDART el 2024, que tuvimos que prorrogar, y para poder estrenar ahora en marzo el 2025 en el GAM. Eso es como la génesis.

¿Qué te llamó particularmente la atención de este texto de Raúl Riquelme? ¿Y cómo pensaste también en montarlo en este formato?

Lo que más me llamó la atención es su forma de escribir, para mi perspectiva, no es tan absolutista, no tiene grandes afirmaciones, no es dogmático. A mi juicio es súper ingenuo y existencial. Entonces esa combinación de factores entre ingenuo y existencial a mí me llama mucha la atención. Esa combinación de palabras a mí me causa gracia, más que las ideas absolutas o las consignas tan determinadas. Esta relativización entre lo ingenuo, lo profundo, lo existencial me llamó mucho la atención. Lo otro, es que mi forma de pensar el teatro, cuando dirijo obras por lo menos, es pensarlas de manera sonora. El sonido es mi primer punto de aproximación. Entonces lo primero que pensé es cómo la gente va a escuchar este texto que escribió Raúl. Entonces a partir de pensar cómo lo va a escuchar, es como mi bandera también. Siento que lo lindo de cada directora o director es que presenta su propia curatoría de cómo presenta su arte. Algunos son más investigativos, algunos son más profundamente políticos y temáticos, algunos son más visuales. Mi fuerza, mi forma de pensar es el sonido. Entonces siempre pensé en cómo la gente iba a escuchar este texto.

En el texto también se nota ese sentido del encierro que rondaba la pandemia, se nota el contexto de esa época que fue escrito. Esa angustia y esa observación del espacio y la imaginación que crece en un personaje que está encerrado. ¿Qué elementos pudiste rescatar para aplicar tu trabajo que tiene? ¿Cómo potenciar ese texto a través de los elementos sonoros?

La voz de uno suena todo el rato y millones de veces y de diferentes formas. No suena solamente el hablar, suena todo el rato el pensamiento, las percepciones, suena todo el rato. Curiosamente la pandemia, que a mí también me tocó vivirla de manera solitaria, yo vivía solo justo en pandemia, viví esa experiencia de estar conmigo y todo el mapa, toda esta geografía, cartografía de voces gigante que había dentro de mí.  Cuando leí el texto también me pasó que recordé mis momentos de encierro donde todas estas voces emergían de mí. De hecho, también la obra se monta de esa manera, en esta ramificación de voces. Lo que hace la voz es sacar todo. Por eso están todos esos micrófonos distribuidos. Son todas las voces que hay en su interior, las miles de voces que hay en su interior. En ese sentido también hubo resonancia. Como yo viví esa experiencia, yo me hice esa pregunta mientras estuve encerrado en pandemia, fue mucha coincidencia, no fue tan: “¿Qué hago?”, sino que se me ofreció algo que tenía muy a flor de piel en mi experiencia. No es tan complejo, no me considero una persona muy compleja. La complejidad está en lo técnico, pero lo que quiero decir, el texto es súper sencillo, son preguntas bien existenciales, súper simples que uno se hace hasta en su cotidiano. No necesariamente tiene que ver Dinosaurios en mi ventana, para preguntarse por el futuro, por la existencia.

Podemos observar lo que ha caracterizado tu trabajo, desde el diseño sonoro, desde la puesta en escena, a través de la sonoridad, de la acústica, del ambiente, que en el fondo el texto traspasa y se inserta en esta performance. ¿Cómo funciona tu trabajo con este proceso sonoro? Podemos identificar una obra tuya de inmediato, a través de ese mecanismo sonoro. Cuéntame ¿Cómo funciona ese proceso? ¿cómo se trabaja todo este tema con los micrófonos, los loops, la acústica, etc?

Cualquier persona cuando vea el espectáculo puede intuir, que me parece muy genuino, de que hay una metodología súper como clara y notoria. Voy a derrumbar eso, porque en realidad funciona de manera súper intuitiva, no tengo una metodología. Hay una metodología, un modo, un modo de pensar el arte escénico que tiene que ver con el sonido y la escucha, que son banderas que yo utilizo para el trabajo, pero cada trabajo va apareciendo solo. Hay una cosa que me gusta mucho es no tener ideas preconcebidas. Dejar que el laboratorio mismo del trabajo, en este caso yo lo dedico mucho tiempo trabajando, generamos cosas que yo ni siquiera sabía a dónde iba a llegar, fueron sucediendo, y a partir de lo que sucede yo empiezo a armar modos de ensayo, dinámicas de ensayo, pero no hay ninguna metodología, no tengo una metodología de trabajo, sino que diseño cada metodología según lo que me toque trabajar.  Yo no sabía que Dinosaurios iba a quedar así, y no me gusta saber nunca cómo van a quedar, sino como que dejo que el recorrido de ensayar, de crear, me lleve al asunto. Soy malo para la cosa preconcebida. De hecho, estoy convencido que para mí las artes escénicas deberían tener ese modo, porque a veces siento que las temáticas, las obras, están medio preconcebidas y siento que lo preconcebido genera poca sorpresa, poca imaginación. Siento que hay que leer, para mí el teatro es un espacio de resistencia, porque en este mapa de realidad tan instantáneo, tan estandarizado, lo que puede hacer el teatro es gatillar imaginación.

También te quería preguntar por el trabajo con Rodrigo Pérez, quien últimamente ha dirigido muchas obras ¿Cómo fue el trabajo con él, pensando que también es como un par director? ¿Cómo fue ese proceso de trabajar con Rodrigo Pérez?

Rodrigo fue mi profesor, entonces conozco su modo, he visto muchas de sus obras, lo he visto actuar también, entonces, ya sabía que lo iba a hacer muy bien. Pero no pensé que íbamos a trabajar tan bien juntos. Uno puede pensar que aunque Rodrigo es director, su trabajo doctoral es bastante lleno de sugerencias, y sugerencias de dirección o comentario. Muy por el contrario, se entregó completamente a las aventuras que yo le proponía sin ningún cuestionamiento, al contrario, con mucha entrega, con mucha humildad, “ok, me encanta” y eso hizo que nuestra alianza, creando, fuera muy divertida también. Yo le proponía cosas que no estaban premeditadas ni preconcebidas, y pudimos hacer un recorrido súper intuitivo juntos. Tuve la suerte de que en este modo de dirigir, ir descubriendo la suerte de tener, contar con un performer que se entregara. En ese sentido fue súper colaborativo. Yo proponía un montón de acciones y él se sumergía en las acciones. Él y todo el equipo en realidad, se sumergían en las acciones. Siento que uno cuando dirige es como: “No es una empresa”, no estoy dirigiendo un equipo para que me obedezca lo que tengo que hacer. Si no, muy por el contrario, yo planteo y soy guía de una acción en conjunta. Todos se sumaron con mucha entrega al desafío de transformar este texto del Raúl en una experiencia sónica.

Quiero saber un poco de tu trayectoria en las artes escénicas, has trabajado con distintos tipos de obras, distintos tipos de temáticas. Al principio con la dupla Piriz – Marabolí, ahora por tu cuenta, ¿Cómo ha sido ese trayecto que has recorrido en el ámbito de las artes escénicas con tu trabajo?  

Yo soy súper agradecido de todos los espacios en los que he participado porque siento que he aprendido. En un inicio, cuando yo empecé a hacer sonido, música, directoras como Manuel Infante, Paula Aros, Muriel Miranda e Isidora Stevenson me invitaron: “Haz lo que tú creas que puedas hacer” y ahí empecé. Trabajé en muchas, hice la música y sonido durante muchas obras, durante mucho tiempo y eso creo que me generó el impulso de querer dirigir algo personal. Aquí hay un asunto que explorar y que puedo explorarlo, que se puede dirigir bajo esos parámetros, como concebir una obra bajo esos parámetros. Sin duda que mi alianza con Trinidad Piriz fue una súper buena escuela para mí, para ambos, en donde pudimos justamente poner en evidencia todas las posibilidades que las cuales nos invitaba el sonido para dirigir, montar, decidir cuáles escenas, los entramados, las temáticas, cómo iban a ser abordadas las del sonido. Ahora en solitario, que en escena en solitario. Siempre siento que se sobresalta mucho la figura del director o directora y la directora o director  siempre trabaja con un entramado de equipos que ayudan a que el planteamiento de ideas, el planteamiento de contenidos florezca y se pueda configurar en un espectáculo que pueda brindar esto. Construir esa experiencia, siento que es un accionar compartido total.

La obra está en cartelera del GAM, y en el último tiempo ha explorado nuevas temáticas y nuevos formatos y ha tenido una programación bastante más experimental que antes. Esta obra funciona en ese ámbito más experimental, ¿cómo lo ves, este formato, esta obra insertada también en la cartelera del GAM?

Muy agradecido, porque el GAM tiene un lugar súper concéntrico, es una plataforma más masiva que cuando uno está en un teatro más chico, entonces tienen posibilidades de ver muchas más personas. A mí me gusta mucho también la idea de lo experimental, pero también tengo una idea muy personal como la experimental como algo amable, como algo cercano. En realidad, no sé si lo logro, pero mi intención es que las cosas tengan un carácter experimental, pero que sean súper entendibles, que no sean tan crípticas o herméticas. También es válido, no estoy desvalidando esa opción, pero a veces las cosas experimentales son muy difíciles de acceder a lo que quieren plantear. Tengo una idea de que la cosa sea experimental, pero totalmente asequible. Creo en lo experimental en medida que sea un modo de resistencia a los formatos convencionales que tenemos en la cabeza, como Instagram, Netflix, que son modos que tenemos ya en común, estamos absolutamente colonizados por esos formatos. Soy profesor, la imaginación de mis estudiantes, por ejemplo, está sin ellos quererlo, es el modo de realidad no más, están contaminados absolutamente por ese modo de ver. Entonces creo lo experimental no tanto por querer ser raro, ni mucho menos, yo creo lo experimental como un modo de resistencia a poder invitar a otro imaginario. Entonces me gusta mucho la combinación de inventar algo experimental, pero que tenga un carácter totalmente asequible.

Creo que la obra que proponemos es súper ridícula. Es un gallo que le queda ropa grande, un gallo en bata que dice ver dinosaurios, y se hace preguntas. Hay gente que me dice que la encuentra profunda, que la encuentra poética, que la encuentra compleja, pero también hay gente que dice que es ridícula. Es una palabra que me fascina. Yo también creo en lo ridículo, no todo lo temático tiene que ser abordado de manera extrema. Hay directores y directoras que plantean contenidos de manera muy seria, y lo hacen muy bien por lo demás. Yo felicito y admiro a esas personas, solo que yo personalmente no soy capaz de hacerlo, soy más ridículo, soy más sonso, soy más estúpido. Durante años pensé que eso no era posible. Yo creo que negué un poco esa capacidad de ponerla como un ejercicio, y ahora que estoy más viejo, digo chao, esta persona ridícula va a montar obras ridículas para invitar a la audiencia a vivir una experiencia más simple, más ingenua, más sonsa. Son siempre medias vilipendiadas, que ridículo, que sonso, que estúpido, pero son mis banderas, mis batallas.

¿Qué le dirías a la gente para invitarla a ver la obra que se está presentando en el GAM?

Que se va a divertir, es súper simple, súper sencilla, la invito a escuchar también. La invitación es a escuchar una voz que está en encierro, que delira. Yo creo que es algo que nos pasa a todos, lo que le pasa a este personaje es algo que le puede pasar a cualquiera de nosotros. Un personaje que delira, que se cuestiona, que dice estupideces. Dinosaurios en mi ventana es una obra que básicamente invita a la gente, a visitar sus voces interiores para poder abrazarlas, conocerlas y contemplarlas y escucharlas con más claridad. Si en el fondo eso queremos todos, sentirnos un poquito mejor.

FICHA TÉCNICA

Dramaturgia: Raúl Riquelme
Dirección: Daniel Marabolí
Actuación: Rodrigo Pérez
Diseño integral: Ismael Valenzuela
Composición musical: Sibila Sotomayor
Producción: Nicole Venegas
Piezas gráficas: Javier Panella
Realización de vestuario: Jota Etchepare, Angélica Vilches
Prensa: Francisca Rojas

Coordenadas

TEMPORADA
15 de Mar al 6 de Abr 2025
Vi y Sá — 20 h
Do — 19 h
​(Excepto 29 Mar)
https://gam.cl/teatro/dinosaurios-en-mi-ventana/

 

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