Por Galia Bogolasky
Entrevistamos el reconocido director, que acaba de estrenar su nuevo largometraje de ficción Vendrá la Muerte y Tendrá tus Ojos que se presentó con gran éxito en el Festival de San Sebastián 2019. La película se trata del miedo a la muerte, el amor, la esperanza y fortaleza humana. La película es protagonizada por Amparo Noguera y Julieta Figueroa.
Dos mujeres que han compartido toda una vida juntas se ven enfrentadas a la enfermedad de una de ellas, quien decide no hacerse ningún tratamiento; juntas se mudan a una pequeña casa en medio del bosque, hasta el día que la muerte llegue a sus vidas, mientras reencuentran el amor que el tiempo había ido sepultando por la rutina. Esto fue lo que José Luis Torres Leiva nos contó, en una entrevista por Zoom.
¿Cómo surgió la idea de esta película, de esta nueva producción?
La idea surgió principalmente porque era el tema de la muerte, se venía arrastrando cuando escribí el guion, sobre todo porque cuando cumplí los 40 años varios amigos murieron como en esas mismas edades por una enfermedad o distintas circunstancias. El tener tan cerca ese tema y esos procesos me hicieron preguntarme muchas cosas también con respecto a esto. Y ese fue el punto de partida de la película. También una serie de lecturas que tuve en ese mismo tiempo, leí un libro de Pavese que se llama El oficio de vivir, fue el último libro que él escribió y que finalmente la película terminó con el título de un poema de él, porque era un escritor que estuvo como rondando en esa época. Entonces, quería hablar de la muerte, sabía que era un tema que ha sido tocado muchas veces en el cine, pero quería tratar de mostrarlo desde otra perspectiva, quizás sin dejar de ser doloroso el proceso, pero sí como una pequeña luz de esperanza hacia el final, en donde el ruido que se hace en esa espera significa para los personajes volver a encontrar lo esencial en ella.
¿Qué formato te acomoda más? ¿ficción o documental?
Me gustan los dos. Ambos se complementan en lo que he podido hacer, yo comencé haciendo documental, y esto me ha permitido también ir aprendiendo poco a poco a observar no solo lo que tengo frente a una cámara, sino que también los personajes, las personas. Entonces, toda esa enseñanza que tiene el documental, aparece en la ficción. Por ejemplo, todo el trabajo con las actrices en la película tuvo mucho de eso también. Lo que cuento siempre es que con Amparo y Julieta nunca ensayamos una escena antes de la película, sino que en realidad tuvimos conversaciones sobre el tema, hablamos de sus propios miedos, de sus propias experiencias en ese aspecto. Y la cámara después captó casi documentalmente esas mismas sensaciones que tuvimos al momento de esas conversaciones. Así que hay algo preparado, obviamente, de ficción de la puesta en escena, pero siento que para mí era muy importante trabajar el sentimiento. Es una película que tiene pocos diálogos, en donde realmente están interpretando a un personaje, pero hay un sentimiento que tiene que ver con ellos, y eso fue importante también.
¿Cómo fue el proceso de escritura? ¿Cómo fue ese proceso creativo en el trabajo de guion?
Complicado, porque transmitir en papel algo que puede parecer muy abstracto, describir un sentimiento o un estado de ánimo de los personajes, pero en realidad fue un guion, finalmente, simple de escribir, descriptivo en ese sentido. Me concentré mucho más después en el trabajo con Amparo y con Julieta para sacar partido de cada una de las escenas porque estaban en el guion, entonces, creo que hubo una combinación de los dos trabajos, tanto de la escritura como del trabajo con ellas.
¿Cómo fue que llegaste a las actrices? ¿por proceso casting o pensaste la película altiro en ellas?
Fue desde que se me ocurrió la idea, siempre estuvo Julieta y Amparo en mi mente para la película. Con Julieta, siempre he trabajado con ella, somos amigos hace mucho tiempo. Y Amparo es una actriz que admiro muchísimo, su trabajo en teatro, cine, en todo formato. Yo había hecho unos cortometrajes con Amparo, entonces, se dio la oportunidad de trabajar con ella como protagonista, pero siempre estuvieron desde el comienzo. Escribí los personajes pensando en ellas.
¿Cómo fue elegir estas locaciones? Esto fue filmado en Puerto Varas y Puerto Montt.
El lugar era un protagonista más de la película, se vuelve un factor muy importante sobre todo en la última parte de esta. Era importante encontrar las locaciones adecuadas. Me pasa que los lugares donde hago las películas no los conozco tanto, los he conocido como de pasada. Por ejemplo, Puerto Varas y Puerto Montt había ido solo una vez antes, pero tenía el recuerdo y la sensación de ver esos bosques, esos paisajes que me llamaban la atención e hice un viaje para rectificar si era el lugar adecuado y, finalmente, fuimos encontrando poco a poco unas locaciones ahí. Sentía que era el lugar preciso para realizar la película.
¿Cómo fue el trabajo con el director de fotografía y el camarógrafo? Pensando en la visualidad de esta producción.
Eso era algo muy importante, como una película centrada en el gesto, en el detalle, la cámara se acerca hacia los rostros, se acerca también hacia los detalles del cuerpo de las actrices y eso habla mucho más que un diálogo, habla mucho de los procesos de ellas. Fue algo que fuimos viendo con el director de fotografía desde cómo trabajarlo, también lo vimos con las actrices, ellas tenían la conciencia de que como la cámara estaba tan cerca, el gesto tenía que ser mínimo porque se iba a notar mucho si actuaban un poquito de más, era algo bien preciso. Entonces, igual fue bueno buscar ese equilibrio en ese sentido, ellas fueron súper generosas porque en la película casi no usamos maquillaje, era importante capturar realmente la piel, los rostros, la mirada, tal cual como es, era muy significativo, algo primordial dentro de la película. Yo sentía que esa concentración en ese gesto transmitía un sentimiento de lo que estaba sucediendo, y lo que le estaba sucediendo a ellas también es ese proceso.
Cuéntame sobre el rol del personaje de Nona Fernández, que se lleva finalmente la mayor parte del diálogo.
Bueno, yo admiro mucho a Nona en su escritura, también la he visto actuar en sus obras y la conocía. Había hecho un pequeño trabajo con ella y cuando la conocí hubo algo en su manera de ser, de una entrega, un cariño que te hace sentir muy cómodo la primera vez que la conoces, que me pareció que ese personaje de la hermana de Amparo era un personaje que sostenía, sostenía a su hermana y fue indudable tenerla a ella en la película. Tiene todos esos diálogos porque es el personaje que le da una mano en un momento difícil al personaje que interpreta Amparo Noguera, entonces, es ese sostén en esos momentos.
¿Cuál es el significado finalmente de las escenas que insertarte en el bosque? Son escenas súper poéticas, que tiene que ver más con la literatura. Cuéntame cómo llegaste a eso.
Cuando ellas toman la decisión y se van al bosque, la película se abre, por decirlo así, hacia otra narrativa. Es una película que hablaba sobre la muerte, pero para mí también lo importante es que era una película que hablaba sobre el amor. Mostrar la agonía del personaje a mí no me interesaba tanto mostrar el proceso de muerte, entonces, busqué una manera de representar el sentimiento de ese reencuentro que ellas tienen en esa cabaña a través de estas dos historias que se cuentan o que aparecen a partir de lo que ellas van sintiendo. Por eso también están relatadas como si fueran cuentos y están relatadas con las voces de ellas, o sea son los personajes los que hablan con sus voces. Más que una alegoría, lo que me interesaba era que significaban un sentimiento de ellas, se volcaba en esas historias y también permitía que la película se fuera liberando de la narrativa que tenía la primera parte, por eso se va expandiendo hacia otras historias. Esa fue la elección de querer trabajarlo así.
¿Cuáles son los temas que te mueven, que te motivan a contar historias?
Son muchos, pero el cine ha significado el acercamiento hacia historias que a mí me llaman la atención, pero también el descubrimiento de las personas, ese es mi mayor interés siempre. Siempre fui bien retraído, bien tímido, y el cine me permitió conocer personas y conocer historias que de alguna u otra manera yo no hubiera tenido esa oportunidad. Entonces, es el interés por retratar personas, sus historias, sus problemáticas de una manera humana, cómo salen adelante, cómo hay esperanza, cómo hay luz en momentos difíciles. Ese es mi mayor interés al momento de hacer películas, que tiene que ver con el comunicarse con el otro.
Cuéntame también del proceso del rodaje, ¿cuánto tiempo duró? ¿cuáles fueron los mayores desafíos que surgieron durante el rodaje en el sur? ¿cómo fue ese proceso?
La película se grabó durante un mes, en enero y los primeros días de febrero. Y el mayor desafío fue que el sur tiene un clima impredecible, estábamos en verano, pero podía llover de un día para otro y era un poco acostumbrarse a eso y hacerlo parte de la película, o sea si un día llovía y teníamos que hacer algún exterior lo íbamos a hacer parte, fuimos mentalizados de esa manera. Para mí era importante que la película fuera rodada en el verano, porque yo siento que la luz era un factor primordial para contar la historia. Quería contar una historia que tuviera esa melancolía, esa tristeza de lo que sucede, pero me interesaba que todo estuviera invadido por esa luz de verano, siempre hay dentro de ese dolor la posibilidad de ver esa luz, de apreciarla, de que puedes abrir la ventana y ver el paisaje de ese bosque, entonces, por eso fue la elección de hacerla durante esa época.
En cuanto a tu desarrollo como cineasta, ¿sientes que has llegado al punto que querías?
Uno nunca deja de aprender, cada proyecto es un nuevo desafío, un poco empezar desde cero. Yo creo que falta mucho, incluso creo que uno nunca llega a tener esa sensación y me parece que eso también es algo positivo porque te impulsa a seguir creando y seguir haciendo películas. Yo creo que algo que me ha ayudado mucho es que todas las películas tienen distinta naturaleza y que, si una película tiene un presupuesto, como, por ejemplo, esta que pudimos hacer con algunos fondos y que es una película que fue realizada con ese presupuesto, pero quizás la próxima película la haré con el celular y tres o cuatro personas, y eso no va a significar ir hacia atrás todo lo contrario, es un nuevo desafío. Entonces, he podido hacer películas con nada de presupuesto, con lo que tengo a mano, o películas de esa manera, y creo que es importante tener esa conciencia, porque en realidad lo que importa es contar historias, que uno quiera hacer una película y eso siempre se va a plasmar en el resultado final. Cada película la veo como un reiniciar, empezar de nuevo, y un nuevo desafío.
¿Cómo ha sido estrenar esta película en tiempos de pandemia, online?
Le he encontrado un sentido, o sea nunca pensamos que íbamos a estrenarla de esta manera, no pensamos que iba a ocurrir algo así en todo el mundo, pero yo lo veo positivo en el sentido que la película llega a la casa de una persona, en la intimidad de su hogar, y creo que la película habla sobre eso, habla de esa intimidad, de la posibilidad de estar para el otro y quizás en este momento que estamos viviendo qué mejor manera de verla así. Se que va a haber un momento cuando todo esto pase, que no sabemos cuando será, en que haya la posibilidad de que se pueda mostrar en una sala de cine, en la pantalla grande, pero en realidad no lo veo como algo negativo, sino que, todo lo contrario. Creo que todo tiene su tiempo, entonces, se que va a llegar un tiempo para poder apreciarla de otra manera y si en este momento es la manera de verla, me parece que tiene un lado positivo.
Si, de hecho, el año pasado la pudiste estrenar en el Festival de Valdivia, ¿no es cierto?
Si, se estrenó ahí en Chile, en el Festival de Valdivia, en pantalla grande con público, pero bueno, el próximo año quizás que se pueda mostrar en alguna función, va a ser importante poder apreciarla así.
¿Y algún proyecto a futuro? ¿Estás escribiendo algo nuevo?
Sí, en esta época me ha costado un montón poder concentrarme en eso, pero sí tenía unos proyectos el año pasado para una ficción y un documental, que el mes pasado he podido retomar y trabajar un poco. Creo que también algo que ha pesado mucho en esta época es la incertidumbre de lo que pueda suceder, ahora, más que nunca, esa gran duda nos afecta a todos de todas maneras. En un comienzo me costó mucho proyectar, pero siento que lo que está sucediendo ahora con el estreno de la película, es que estas películas van a encontrar sus tiempos, no tengo ningún apuro con realizarlas, y ahora quizás es el momento de, yo siento al menos, volver a valorar otro tipo de cosas, observar otro tipo de cosas, aprender a mirar lo que está frente a uno, mirar a las personas desde otra perspectiva, sin esa velocidad que teníamos antes, y creo que ese aprendizaje va a estar en esos proyectos.
Esta posibilidad de ver la película online permite que la mayor cantidad de personas pueda verla y también se pueda hablar sobre el tema de la muerte sin esa carga que generalmente tiene, casi tabú y que ha cruzado tanto tiempo de nuestras vidas. Siento que es lo más cierto que tenemos y no es necesario estar pensándolo con esa carga media oscura que tiene, sino como un proceso de vida más que un proceso de muerte. Para mí era importante eso al realizar la película y también lo es hablar sobre eso.
Ficha técnica
Dirección y Guion: José Luis Torres Leiva
Productora: Catalina Vergara
Elenco: Amparo Noguera, Julieta Figueroa
Género: Ficción / Drama
Duración: 80 minutos
Distribuye: Storyboard Media
Entradas a la venta:
Valor: $2.000.-
Valor: $2.000.-