FEMCINE Crítica de cine “Club zero”: Secta nutricional

Por Juan Marín

Las redes sociales contienen una diversidad infinita de contenidos. Hay influencers que hablan, entre otros temas, de cine, fitness, yoga, mascotas, “auto ayuda”, estilos de vida de comida saludable, etc. Estos últimos han generado gran alarma en el mundo dado los riesgos en que han puesto a la población, especialmente juvenil. Sin ir más lejos, en Chile durante el 2021 la SEREMI multó a la modelo e influencer Roxana Muñoz por promover entre sus más de 300 mil seguidores un peligroso “ayuno intermitente” para bajar de peso. Esta película de la polémica directora austriaca Jessica Hausner es sobre estas figuras y retrata de manera inquietante a los mesías alimentarios que fomentan un tipo de “alimentación consciente”.

Club zero gira en torno a una profesora (Mia Wasikowska) que acepta un trabajo en un colegio de elite para dar talleres sobre nutrición. En poco tiempo, la maestra establece un vínculo con sus alumnos, al punto de convertir su clase en una especie de secta nutricional. La obsesión de sus ideas, llega a un extremo peligroso al convencer a los miembros del taller de que se vive mejor sin comer.

Este drama psicológico en forma de sátira es acerca de los trastornos alimentarios, pero no precisamente para burlarse de la gente que los padece, sino más bien para reflexionar sobre lo peligroso y delirante que puede ser el dejar de comer o vomitar tu comida a propósito. Es una película que refleja la inconsciencia de los gurús baratos de internet que venden una noción equívoca de una mala alimentación, lo cual puede llevar muchas veces a consecuencias irreversibles. Es inquietante saber lo fácil que puede ser manipular masas, sobre todo gente joven, y llegar a tener un control absoluto de lo que comen. Ese es una de las graves problemáticas de las redes sociales, que personas así tengan voz para promulgar sus falsos discursos.

Es un filme incómodo, con momentos asquerosos, pero provocativo y desconcertante. Jessica Hausner es una de las cineastas más interesantes del último tiempo en el cine europeo. Es una directora difícil de tolerar, no creo que su cine sea para cualquiera. Es de la misma escuela austriaca de grandes directores como Michael Haneke y Ulrich Siedl. Además de la transgresión, comparten sus estilos meticulosos, la utilización de planos fijos y el casi nulo movimiento de cámara.

La cinta es perturbadora y curiosa. Esta convincente propuesta es como si se uniera la narrativa incisiva del Yorgos Lanthimos de Canino con la estética colorida y simétrica de Wes Anderson. Ese diverso mix produce una cinta extraña y desproporcionada, pero que a la vez resulta ser de alto interés. Parte del público la odiará por su ritmo lento y sus provocativas imágenes, pero si te gusta este tipo de cine lo más probable es que la ames.

Técnicamente la película es impecable. La fotografía compuesta de colores chillones es atractiva y original. El excelente director de fotografía Martin Gschlacht, quien ha trabajado junto a Hausner en todas sus películas, hace una labor formidable. La dirección de arte también es espléndida, cada encuadre está pensado a la perfección para recrear un set llamativo y que genere incomodidad. El maquillaje es otro gran elemento. A medida que avanza el metraje y los alumnos están comiendo cada vez menos, la técnica cosmética logra gran realismo en mostrar el deterioro en sus rostros y cuerpos producto de un ayuno extremo. La banda sonora del film es otro punto fuerte, seduce e hipnotiza. No por nada ganó mejor música en el Festival del Cine europeo y en el Festival de Sitges. Las actuaciones también están muy correctas, los alumnos lo hacen muy bien, aunque la que sobresale es la reconocida actriz Mia Wasikowska. Su mirada perturbada y sus aires de líder dogmática impresionan.

Es un filme que no agradó para nada a la crítica del Festival de Cannes. La recibieron con dureza. Es esperable, ya que en general las películas de Jessica Hausner suelen ser divisoras. Tiene secuencias de una repugnancia inolvidable y una ambiciosa puesta en escena. No creo que esté dentro de lo mejor del 2023, ni que sea lo mejor de su directora, pero la crítica fue injusta. Claramente hay que tener estómago para este film, pero es difícil que deje indiferente. Hay escenas que quedarán para siempre en la memoria. Una gran oportunidad para visualizar un cine arriesgado desde una perspectiva femenina.

Ficha técnica:

Título original: “Club zero”

Dirección: Jessica Hausner

Guion: Geraldine Bajard y Jessica Hausner

Fotografía: Martín Gschlacht

Música: Markus Binder

Reparto: Mia Wasikowska, Sidse Babett Knudsen, Elsa Zyberstein, Mathieu Demy, etc.

País: Austria

Duración: 110 min

Coordenadas

FEMCINE

Cineteca Nacional

Sábado 7 de Septiembre

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