Por Gabriela Bravo desde Cannes
Piccolo Corpo es una película que se presenta en competencia en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes. Con su primer largometraje, la directora italiana Laura Samani nos invita a recorrer el peligroso y tortuoso camino que emprende Ágata hacia un santuario «milagroso» en donde podrá bautizar a su hija que ha nacido muerta y que, según las creencias de la época, nunca podrá acceder al cielo.
Pese a que todos le dicen que se olvide de eso, ya que tendrá otros hijos, Ágata desentierra a su hija, la mete en una caja y deja su isla natal, el único lugar que ha conocido en toda su vida. Con una pena fría y una determinación ardiente, la joven madre deja todo lo que tiene por ir a «salvar» a su hija del limbo.
Una película de una ternura y fineza dada por la sobriedad de sus personajes, que, bajo una apariencia parca, esconden toda la profundidad de sus sentimientos.
En conversación exclusiva con Culturizarte, Laura Samani nos cuenta los pormenores de su película
¿De dónde vino la idea de Piccolo Corpo?
Viene de una historia que me contó un hombre que conoció estos lugares especiales, estos santuarios. Yo no sabía nada sobre esto, comencé a realizar investigaciones porque aún existe uno de estos en mi región, claro que no tiene las mismas características que al comienzo, pero es una pequeña iglesia y está ahí. Cuando comencé a estudiar descubrí que en el siglo XVI era muy común tener estas capillas en los Alpes, así como también en Italia, Francia, Suiza y Austria, había cientos y cientos. Fue muy sorpresivo saber y entender que esto no era algo conocido, nadie sabía de esto, y lo que pasaba usualmente era que los padres de los bebés emprendían este camino porque era peligroso y largo. Yo quería que la madre realizara el viaje porque no pudo soportar el hecho de que estuviera esperando en casa. Yo no podría, yo iría a realizar el viaje, esa es la razón.
Hay una escena donde una caravana es robada y una ladrona toma la caja que lleva Ágata y la abre, incluso para un chico o una chica mala hay cosas que son sagradas.
Sí, es uno de los momentos más conmovedores para mi también. Pienso que nadie en la vida real es totalmente bueno o malo, y así es en la película. Todos cometemos errores y todos encuentran su propia forma de redimirse y así es como creo que es la humanidad. Realmente creo que la ladrona está empatizando inmediatamente con Ágata porque ella es mujer, pero también hace cosas terribles, ella es la que comanda el plan de tomar la caja. Nosotros, como parte de la audiencia, sabemos el contenido de la caja, así que sufrimos por Ágata. Pero claro que el bandido no sabe, y cuando ella se entera, por primera vez en la película tenemos a alguien que refleja sus emociones, porque Ágata se está guardando todo.
¿Podrías decir que tu película es feminista?
Sí, lo es, en el sentido de que me gusta tratar a los personajes femeninos como mujeres en la vida real, como trato a los hombres. No se trata de estar contra los hombres, sino que tratarlas a ellas como seres feroces.
¿Es una heroína?
Sí, lo es.
Pero no es una heroína con capa que tenga todo bajo control, está totalmente perdida, pero es una heroína.
Ella está muy perdida, pero realmente motivada. Ella no sobre expone sus emociones, no es melodramática como nosotros los latinos, soy italiana (ja ja ja). Ella está realmente controlando sus emociones, si ella se abandonara a sus emociones pararía el viaje, no llegaría. Claro está que conocemos a Ágata cuando este suceso horrible le pasa, así que no sabemos cómo era antes, no la conocíamos. Pero esta pregunta está realmente conectada a la pregunta anterior, respecto al feminismo. Ágata es un personaje frío, así que, de acuerdo con eso, ella no demuestra sus emociones. En toda la historia del cine tenemos un montón de personajes de hombres fríos que, incluso cuando no podemos conectar con ellos, los admiramos. Este es un gran tema para discutir así que estoy tratando de ser breve. Cuando conocí por primera vez a Celeste yo ya tenía algo en mente, Ágata era cálida, ansiosa, frágil, delgada, y ella no, Celeste es fuerte, alta, callada y realmente tímida en la vida real. Así que todos estos aspectos que ella forjó en el personaje me volaron la cabeza, porque yo estaba pensando en alguien totalmente diferente. Pensaba que si cosas tan terribles te pasaran lo único que harías es desesperarte y llorar todo el tiempo… pero no, está permitido experimentar cosas de la manera en que tu quieras visitarlas.
Creo que esto de “no decir nada” es muy duro, y es fuerte para la audiencia ver a alguien que está apenado, pero que no puede expresarse, ni mostrar su dolor.
Especialmente porque como parte de la audiencia sabemos por lo que ella está pasando, pero no podemos ayudarla. Esto es algo filosófico, de cierta forma, enseerio creo que no podemos ayudar realmente a alguien en este tipo de situaciones, no importa lo que digas. Todos experimentamos la perdida, todos, incluso si es una ruptura con un novio pasamos por eso, así que no importa qué es lo que le digas a la persona que está sufriendo, no la ayudará en absoluto. Básicamente, lo único que podemos hacer es estar cerca y callados, respetar la pérdida. Como parte de la audiencia esto es lo que hacemos de cierta forma, porque no podemos entrar a la pantalla y decir “quiero abrazarte”, tenemos que permanecer en silencio y ser testigos de eso, y esto es lo que pasa también en la vida real, si eres lo suficientemente respetuoso y paciente.
¿Cómo construiste los personajes de Agata y Lince?
Agata es lo que te comenté antes, cuando conocí a Celeste cambié de parecer, ella realmente le añadió algo a lo que imaginaba al principio. Encontrar a Lince fue fácil y complejo al mismo tiempo. Yo quería a alguien de mi región, por el dialecto, y no encontraba a nadie. Recibí propuestas de 100 chicas para el rol y un amigo me seguía insistiendo “tienes que conocer a Ondina” pero yo no quería, ella no era de mi región, no hablaba mi dialecto, ella ya era una actriz con experiencia, así que pensé que habría un desbalance, pero no fue así. Eventualmente la conocí y me enamoré porque ella era Lince. Había un gran complemento entre ellas, así que trabajamos juntos porque Celeste era debutante y Ondina no, no quería que se notara esa diferencia, quería que conectaran. Empezamos a trabajar sin el guion, incluso cuando ya existía uno, hablamos un montón sobre lo que pensaban de la historia, de los personajes y así. Después comenzamos a ejercitarnos físicamente en el bosque, en la playa, cosas de ese estilo; cantamos juntas y después comenzamos a trabajar con el guion. Así que fue emocional y físico en un comienzo y después con el material.
¿En qué región grabaron?
En el noreste italiano, es la frontera entre Eslovenia y Austria, así que es la esquina de Italia.
¿Y hay otros idiomas?
Sí, tenemos tres diferentes idiomas en la película. Tenemos dos dialectos: uno tiene influencias venecianas y es muy parecido al mío, ese es el dialecto de Ágata. También está el dialecto friulano cárnico que es el de Lince, los bandidos, la gente de la granja. Por último, está la gente de la mina, que hablan esloveno, en esa parte no hay subtítulos intencionalmente, porque Agata no les entiende.
El personaje de Lince es algo diferente porque es travesti y en esa época era bastante inusual que el personaje de una mujer que se travistiera de hombre.
No creo que fuera algo extraño en ese tiempo, hicimos una investigación histórica. Pero si lo piensas de manera arquetípica, la mujer, al igual que Mulan de Walt Disney, corta su cabello porque no quiere ser la mujer bella que se queda ahí, así que era creíble en aquel tiempo. Si querías irte a vivir al bosque con tus propias reglas la mejor idea era vestirse de hombre, esta fue la primera idea de Lince y desde ahí se agregaron muchas capas al personaje. Pero entiendo cuando hablas de travesti, pero ella no lo es realmente. Me refiero a que no lo sabía al principio, la lógica era vestirme como hombre para sobrevivir, pero ahora después de la película no lo creo. No sé si él es un él, o él es un ella, o ella es un él y lo respeto. Incluso cuando viene de algo histórico, es un personaje muy contemporáneo también porque es fluído, y esta es la razón por la que siempre hablo de “él”, ella decidió ser él, así que lo respeto, y nunca sabremos su verdadero nombre porque ella eligió llamarse a si mismo Lince y ser un “él”, así que está bien. Me encanta esta fluidez porque es realmente contemporánea, incluso cuando han pasado más de 100 años desde este periodo aún puedes ser rechazado por tu familia por estas decisiones, no importa si eres travesti, trans, homo o lo que sea, aún puedes ser rechazado, ¿cambiará esto de alguna forma? ¿un poco? ¿algún día? No lo sé.
¿Es una película de amor o religión o ambos?
Creo que, en general, es más sobre la fe y la confianza. Ahí está el milagro, ahí están las reglas, pero el verdadero milagro no es el milagro para mí, pero este es mi punto de vista. El real milagro es tener un buen corazón, cumplir tus promesas, y ambos lo hicieron, hay redención, esto se trata de ser honesto contigo mismo y ser honesto con otros. Así que sí, es más sobre fe que sobre religión. Y sí, definitivamente es sobre amor.
En una escena el cura le dice a Ágata que su bebé está condenado al limbo para siempre y que jamás se volverán a ver ¿Cómo se puede tratar la pérdida ?
Sé a qué te refieres. En mi opinión Ágata no entiende y Lince en un comienzo tampoco, por diferentes razones. Lo que piensas que perdiste, finalmente nunca lo perdiste, incluso si ―eso que perdiste― no está dentro de ti nunca más, física y emocionalmente hablando. Agata parece haber perdido un bebé y es por siempre, pero de alguna forma hay un lugar no físico, por supuesto, donde están juntas por siempre. Lince, por otra parte, pierde su parte femenina, pero no lo hace y él puede ser ambos.
¿Agata logra cambiar la perspectiva de Lince cuando decide sacrificar todo por su hija?
Si, totalmente. De cierta forma lo que Lince está rechazando desde el comienzo es el lado más oscuro del amor: el dolor. Si amas a alguien, arriesgas también el perder a ese alguien, y si amas a alguien te tienes que comprometer, incluso en pequeñas boberías, como si te mudas con tu novio o novia. Tienes que encontrar compromisos, hasta para cosas pequeñas. Asimismo, es bastante sencillo quedarse solo y no sacrificar nada, pero si sacrificas alcanzarás las más altas o las más profundas ―no sé cuál es tu percepción al respecto― partes de tu corazón y tu alma. Pero claro que es arriesgado, no es seguro, es más fácil quedarse en cama solo y decir que nadie me moleste.
¿Qué sientes al estar presente en la Semana de la Crítica después de un año tan terrible, con cuarentena y pandemia?
Es un milagro, es algo que he deseado mucho. De alguna forma es un alivio porque la última vez que estuve acá fue con un corto en Cine Fondation en 2016, después estuve haciendo un par de cosas por aquí y por allá, pero por sobre todo trabajando en esta película. Así que el estar acá, otra vez con este proyecto y con un montón de compañeros que trabajaron conmigo en el corto, los dos escritores son los mismo, el editor es el mismo, el diseñador de set es el mismo, significa mucho. Lo primero es que el festival cree en nosotros, está creyendo en mi voz y estoy realmente agradecida por eso. Y segundo significa que, bueno, el año pasado parecía suficiente para terminar la grabación, tuvimos que parar un montón de veces por la pandemia.
¿Rodaron en Pandemia?
Sí. Empezamos el rodaje en febrero de 2020 y en marzo hubo cuarentena en Italia, así que grabamos una semana y tuvimos que parar. Después grabamos otra vez en noviembre y de nuevo tuvimos que parar por las infecciones. Rodamos cuatro veces, así que es muy parecido a una serie de televisión. Cinco semanas de grabación tomaron un año completo. Pero pasó de todas formas. He hablado bastante con mis colegas de la Semana de la Crítica, todos estamos con nuestra primera película, lo cual es genial, y también todos filmamos durante la pandemia, así que pasamos por lo mismo. Todos.
Primero realizaste un corto y fue una experiencia totalmente distinta debido a que no había pandemia.
Sí, era más fácil rodar. Fueron sólo cinco días de grabación, yo estaba en la escuela en ese momento así que no estaba tan consciente de todo aún, solo estaba haciendo mi trabajo. Por supuesto que me encantaba el proyecto y luché por él mucho tiempo, pero era una estudiante, tenía un montón de reglas. Estuvo bien, muy diferente.
¿Crees que cambió algo en la película la pandemia, debido a tantas pausas en el rodaje?
Sí, cambió. Durante el verano pasado, mientras esperábamos entender qué estaba pasando en nuestras vidas personales, no con la película, sino con nosotros mismos, pensé en dejar atrás el mundo cinematográfico, realmente no quería seguir. Pensaba “siempre he amado un montón de cosas, esto no es lo único”, “esto es tan agotador”, “está tomando cinco años y seguimos”. Específicamente, sobre la película, tuvimos nieve porque paramos el rodaje. Si hubiéramos grabado todo seguido, como se suponía que debía ser, no habríamos tenido nieve, pero en noviembre la tuvimos. Esto fue algo que cambió. Creo que es bastante entendible desde la película el cambio de lenguaje de la cámara. En un comienzo estábamos muy relajados, tomábamos secuencias realmente largas, hasta ensayábamos los movimientos de la cámara. No tuvimos el mismo tiempo después, cada dos horas alguien podía gritar “Chicos, tenemos muchos contagiados, debemos parar”. Así que con el editor decidimos todo. La edición también tiene otra visión en la segunda parte de la película. La primera es bastante lenta, y de pronto en la segunda es todo más rápido, porque en ese momento no estábamos seguros ibamos a lograr llegar a casa con el material, así que nos adaptamos. Fue realmente útil porque calza perfecto con lo que estaba pasando en ese momento de la historia: los bandidos, la mina, todo estaba pasando muy rápido, así que grabamos rápido también.
Título: Piccolo Corpo (Small Body)
Género: Drama
País: Italia
Año: 2021
Duración: 89 minutos
Director: Laura Samani
Elenco: Celeste Cescutti, Ondina Quadri