Gracias a la Línea de Apoyo a Teatros Universitarios del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Teatro UC presenta una nueva versión de La mantis religiosa. Bajo la dirección de Alexandra Von Hummel, la reconocida pluma de Alejandro Sieveking vuelve a nuestro escenario con una de sus comedias más populares entre el 14 de agosto y el 13 de septiembre.
Entre platos de pichanga, carne mechada y dulce de membrillo, Alejandro Sieveking nos presenta la historia de tres hermanas bullantes y llenas de deseo que, una noche, invitan a cenar al pretendiente de la más joven. Durante la velada, en medio de una atmósfera opresiva y sobrenatural, la revelación de una cuarta hermana escondida en la casa emerge con humor y brutalidad.
En esta nueva propuesta de La mantis religiosa —estrenada por primera vez en 1971 por Teatro del Ángel—, Tamara Acosta, Verónica Medel, Thais Zúñiga, Manuel Peña y Luciano Reinoso son dirigidos por Alexandra von Hummel, en el primer estreno de Teatro UC en 2025, que cuenta con el financiamiento de la Línea de Apoyo a Teatros Universitarios del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
A diferencia de otras versiones de la obra, aquí no existe una actriz que desempeñe el papel de ‘la Mantis Religiosa’ porque, según explica la directora, pareciera que su imagen depende de quien la observa. “¿Es monstruosa? ¿Es bella? ¿Tiene un problema? Esa diferencia nos pareció atractiva pues la vuelve una presencia ambigua e inquietante. Optamos por pensarla como una presencia imposible de fijar y confiamos en que sea la imaginación de cada uno la que levante una imagen. La imaginación es siempre más poderosa, ya que lo que imaginamos habla de nosotros y nuestros propios temores”, afirma la actriz y docente Alexandra von Hummel.
Además, aunque el ingenio y agudeza del texto lo acercan al género de la comedia, de acuerdo con la dirección, esta obra se resiste a ser clasificada: “Quien lo ve es quien decide si es comedia o drama. Tiene una capa muy graciosa, pero otras la llevan a otro lado. El elemento de la Mantis, este secreto, te hace dudar dónde situarla”.
DETRÁS DEL DESEO DE TRES MUJERES
Gabriela Aguilera, directora artística de Teatro UC, cree que esta versión de La mantis religiosa nos ofrece un retrato que conocemos, pero que al mismo tiempo nos divierte e incomoda: “Nos hace pensar en el tiempo, en las familias, en las mujeres que somos y conocemos, en el deseo y en la violencia que surge del miedo a la diferencia”.
“Encuentro que es una obra que tiene mucho encanto, algo entrañable. Se presentan ante Juan (el pretendiente) como mujeres resueltas, pero debajo de esa pose son mujeres vulnerables que tienen una necesidad infantil de ser ‘elegidas’. A mí esa necesidad tan grande de afecto me conmueve”, comparte Alexandra von Hummel.
Asimismo, desde su interpretación, las actrices perciben algo que excede el deseo romántico y sexual de estas hermanas. “Un aspecto importante que hemos discutido es que hay algo más allá del tema con los hombres y lo sexoafectivo en la obra. Vemos en la Mantis una idea revolucionaria que está reprimida por nosotras, la otras hermanas, que seríamos el pensamiento conservador, por así decirlo”, plantea Verónica Medel, secundada por Thais Zúñiga: “Investigamos que Alejandro Sieveking quiso plasmar en Teresa —la cuarta hermana y la Mantis Religiosa— un símbolo de revolución que estaría oculto durante toda la obra. Y tiene mucho sentido, ya que el texto fue escrito durante el gobierno popular de Salvador Allende. Esa idea ha sido importante en todo el proceso, ya que también es muy latente hoy en día, aunque el contexto sea distinto”.