«Mensajes perdidos», dirigido por el joven realizador Jorge Yacoman, está conformado por videollamadas que realizan diferentes personas, entre ellas el reconocido actor Alfredo Castro.
Durante los últimos meses y en medio de la actual pandemia, diversas producciones a lo largo del mundo se han realizado a pesar de las condiciones adversas, para reflejar la situación que se está viviendo en las más diversas latitudes. Una de las más recientes surgió de nuestro país: se trata del cortometraje «Mensajes perdidos», el más reciente trabajo del realizador Jorge Yacoman, en el que a través de videollamadas realizadas desde 11 países en tres continentes, más de 40 personas, entre ellas el reconocido actor Alfredo Castro y la actriz argentina Paula Flaks, sostienen diálogos íntimos en medio de su confinamiento dirigidos a un interlocutor, que en este formato pasa a ser el mismo espectador.
En sólo nueve minutos y medio, el corto reúne videollamadas provenientes de países tan diversos como Chile, Argentina, Estados Unidos, México, Italia, Francia, Polonia, Finlandia, Ecuador, China y Sudán.
Yacoman —quien además de darse a conocer en los últimos años con sus largometrajes “La comodidad en la distancia” y “Fragmentos de Lucía» ha destacado como escritor con sus novelas «El vestigio del silencio» y «Espejos de una ausencia»— explica que su idea con esta nueva producción era «reflejar un poco cómo hemos estado interactuando a la distancia con los demás durante la pandemia, mostrar las falencias de esta comunicación virtual, la dependencia de la tecnología y cómo todo lo virtual pasa a ser real y a veces se pierde el cable a tierra o incluso el sentido de la vida misma”.
En el corto también participan el cineasta Martín Pizarro Veglia («Crisis», 2017) y los actores Benjamín Ávila (quien actuó en el corto «Al atardecer«, también hecho en pandemia) y Américo Muñoz de Viña del Mar, Jorge Fuentes, Constanza Blanco y Malicho Vaca de Santiago, el vocalista y guitarrista de la banda Beso Lésbico, Lagarto Mendoza, y Akseli Kouki de Helsinki, entre varias personas sin experiencia actoral que respondieron a la invitación del director via redes sociales. «Quería que fuera lo más diverso posible», cuenta Yacoman, «que participara toda la gente que quisiera. Incluí a todas las personas que me mandaron videos. A muy pocos les di indicaciones específicas; me interesaba recrear situaciones que ellos mismos hubieran vivido durante el encierro». Por otra parte, el diseño sonoro estuvo a cargo de la argentina Florencia González Rogani que ha trabajado en películas como «Rojo» de Benjamín Naishtat y «Más que hermanos» de Arianne Benedetti, y Fernando Ribero hizo la mezcla de sonido.