En la imagen, obras de: María De la Luz Torres, Lucy Rosas, Dolores Walker, Lautaro Labbé, Ernesto Fontecilla, Patricia Israel, Carlos Ortuzar y Osvaldo Peña. Créditos: Clo Rojo.
La historia de un edificio y de dos instituciones, es lo que presenta la exposición que se puede ver en el primer piso del Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile. Un relato que, junto a la muestra 1970/2025: Abstractos, geométricos, kinéticos, se compone de un total de 115 obras, y que se estructura a partir de cuatro transformaciones ocurridas durante el siglo XX, respecto de la educación en artes visuales.
Hasta el 20 de julio se podrá ver Colección MAC: Memoria habitada, exposición que ocupa las cinco salas del primer piso del Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile, y que reúne 90 obras (87 de las cuales pertenecen a la Colección MAC) que van desde 1928 hasta mediados de los años 80. La muestra, que se presenta en conmemoración de los 50 años de la llegada del MAC a su sede Parque Forestal, dialoga íntimamente con la exhibición: 1970/2025: Abstractos, geométricos y kinéticos. Dicha muestra suma otras 25 piezas y estará abierta al público en el zócalo del mismo lugar hasta el 12 de octubre. Colección MAC: Memoria habitada cuenta la historia del sector poniente del Palacio de Bellas Artes durante el siglo XX. Un lugar que, antes de ser ocupado por el museo, acogió a la Escuela de Bellas Artes.
Según explica Paulina González, encargada de la Editorial MAC y de dirigir la investigación que dio forma a la muestra, “La historia que queremos contar comienza con este traslado del Museo de Arte Contemporáneo al Palacio de Bellas Artes en 1974. Entonces, por una parte, teníamos que hablar de la escuela, que era la institución que había estado antes en este espacio, y, por otra, había que hablar del MAC. En el zócalo, con 1970/2025: Abstractos, geométricos, kinéticos, hay parte de la historia del MAC durante sus años en el Partenón de Quinta Normal, mientras que el primer piso trata la historia de la escuela y del arribo del MAC a Parque Forestal. Hay que entender que este relato se cuenta a través de la Colección MAC. Ese es el pie forzado: hablamos de lo que la colección nos permite hablar. Los que aparecen representados son quienes son parte de este acervo”.
La narrativa presente en Colección MAC: Memoria habitada se estructura, principalmente, a partir de los cambios en los enfoques de la educación en las artes, propuestos desde el Estado durante el siglo XX. Es así como la exposición -que incluye obras de destacados creadores nacionales como Carlos Ortúzar, Eduardo Martínez Bonati, Gonzalo Díaz, Ana Cortés, Valentina Cruz, Nury González y Marta Colvin, etc.- transita desde el cierre (momentáneo) de la Escuela de Bellas Artes tras el golpe de Carlos Ibáñez del Campo (1927), hasta la contrarreforma de la dictadura de Pinochet, el surgimiento de la Escena de Avanzada y el auge de la pintura neoexpresionista.
La muestra también presenta el quiebre estético ocurrido a fines de los años 40, tras la exposición De Manet a nuestros días (1949) y el surgimiento de la llamada Generación del 40 y del Grupo de Estudiantes Plásticos (1948). Una serie de hitos que rompieron con la deriva post impresionista del arte chileno, introduciéndolo en la abstracción y en la cuestión social. Diversas piezas, resultantes de dicho quiebre, se pueden observar en el zócalo de MAC Parque Forestal a través de la muestra 1970/2025 Abstractos, Geométricos Kinéticos. Colección MAC: Memoria habitada, muestra también las tensiones ocurridas en la década del sesenta, en particular tras la reforma universitaria de 1968 y el incendio del Palacio de Bellas Artes (1969). Un siniestro que incidirá en el posterior traslado de la escuela a su actual ubicación en Las Encinas.
“Memoria habitada se llama así porque la idea es plantear que son dos espacios -el MAC y la Escuela de Bellas Artes- viviendo en un sólo lugar. Hay algo de la colección que puede hablar del pasado del edificio y hay algo del museo que también toma parte de esa misión educativa que tenía la escuela. Son dos instituciones que se van permeando y que, a pesar de tener historias diferentes, compartieron un espacio generando una memoria común. Aunque lo de las reformas educativas es lo central, esto es algo que también se intenta dejar presente en la muestra: que en la sala “x” antes se realizaban clases de pintura, que la gente pintaba en el hall. Hay varios guiños que dan cuenta de eso”, explica González.
En Colección MAC: Memoria habitada, además de las transformaciones en los enfoques de la enseñanza de las artes visuales, se exploran los surgimientos de prácticas interdisciplinares, así como una amplia serie de vínculos entre estudiantes y profesores. El diálogo entre esta muestra y 1970/2025 Abstractos, geométricos, kinéticos, se puede entender, además, como la segunda parte del Morfologías sensibles, proyecto de investigación que nació en el contexto de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado y que -en una primera instancia- se materializó en una gran exhibición del mismo nombre presentada entre julio y septiembre del 2024. Su título alude a la capacidad del Museo de Arte Contemporáneo de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, de ser permeado por su entorno.
Colección MAC: Memoria habitada
10 mayo, 2025 – 20 julio, 2025
MAC Parque Forestal
1970/2025: Abstractos, geométricos, kinéticos
10 mayo, 2025 – 12 octubre, 2025
MAC Parque Forestal