SANFIC 2022 crítica de cine “Happer’s comet”: El avistamiento de un cine único y fugaz

Por Paula Frederick

La medianoche puede ser un gran momento cinematográfico. Ese instante de la jornada que representa una transición, donde la mayoría de las personas ya están inmersas en el mundo de los sueños, otros en transición y algunos siguen alertas como si el día no tuviera fin. Una dimensión particularmente onírica, no solo por su luz, la quietud de su energía o la disminución paulatina del ruido cotidiano, sino porque ahí confluyen todos los estados posibles del ser humano, así como sus pensamientos, miedos y fragilidades. En ese instante se basa Happer’s comet, el relato mosaico del director norteamericano Tyler Taormina, parte de la competencia oficial de SANFIC 2022. El realizador ya había sorprendido a la crítica y el público con Ham on Rye, y ahora vuelve con una propuesta sensorial e hipnótica, de 62 minutos de duración, donde no hay diálogos, trama ni vueltas de guion. Solo un grupo de personas que, a medianoche, se escabullen de sus casas en patines, en busca de algo que los mueve en la misma dirección y los espera en la oscuridad.

Estructurada como una serie de viñetas o escenas cortas de una belleza inquietante, la película está enteramente interpretada por familiares y amigos del director, grabada en sus casas reales y en sus lugares de trabajo. Una suerte de sobreposición de la vida real y la ficción, donde el director crea una dimensión de ensoñación y encuentros improbables, entre el mundo que mejor conoce y aquel que alguna vez imaginó. Eso genera una cierta familiaridad que se transmite en cada secuencia, un deja vu, como si estuviéramos presenciado algo conocido, una historia que nos contaron o un sueño que ya tuvimos.

La magia de la propuesta de Taormina está en su paradoja, que además se transforma en la esencia del relato. Cada encuadre, cada personaje sin nombre, voz ni historia, aparece aislada e inmersa en su espacio, como si estuviera atrapada en su dimensión individual y viviera una vida paralela. Pero, al mismo tiempo, sus historias están irrevocablemente unidas, como un enjambre o un ecosistema, desde el momento en que comparten un espacio tiempo y una inquietud intrínseca e indescifrable, que se mueven en patines en la mitad de la noche y avanzan sigilosamente hacia un mismo fin, aunque no interactúen entre ellos.

Hay en el cine de Taormina una valiente forma de aproximarse a la naturaleza humana, sin exceso de palabras, ruidos o acciones heroicas. Simplemente, dejar que la cadencia vital siga su curso, captando esa dimensión apenas perceptible que se encierra en una mirada, en un gesto compartido. En los detalles que todos de alguna u otra forma reconocemos, y que el director los capta de manera vital: el juego de luces tenues que aparecen y se desvanecen en la pared cuando pasa un auto en la mitad de la noche; el reflejo de la televisión prendida en los objetos del estante del living; el murmullo apenas perceptible de los vecinos al otro lado de la pared. Todos elementos cotidianos que, de alguna u otra forma, forman parte de la experiencia humana colectiva.

Cada imagen encierra en sí misma una sensación de nostalgia, acompañada de una cierta atemporalidad, como si fuera un recuerdo de los 80, una escena clásica de los 90 o la antesala de un futuro cercano. Todas estas sensaciones dominantes se presentan como presagios de sucesos que están por venir, y que las interrupciones del montaje dejan en suspenso, en la promesa de un encuentro colectivo. Los patines son el punto de unión, la movilidad una constante. Pero ¿hacia dónde van? El destino lo descubriremos y, posiblemente, todo cobrará sentido. Pero lo que realmente importa es el viaje, el movimiento, la forma de retratar la acción individualidad y colectiva de un grupo de personas distintas entre sí, que de repente se unen al flujo universal.

Como el avistamiento de un cometa, Happer’s comet es una ocasión audiovisual única e irrepetible. De esas estrellas fugaces que cada tanto nos regala el cine. Una oda a los animales nocturnos, que contrasta la parsimonia y ensoñación de la noche con una dimensión energética y artística que brilla con luz propia.

Título original: Happer’s Comet
Dirección: Tyler Taormina
Guion: Tyler Taormina
Fotografía: Jesse Sperling
Reparto: Grace Berlino, Jax Terry, Ryan McGlade, Michael Gugliamo, Dan Carolan, Brandon Cassanova, Tim Sullivan, Brianna Taormina, Tyler Taormina
Productora: Omnes Films. Distribuidora: Factory 25
Año
: 2022
Duración
: 62 min.
País
: Estados Unidos
SANFIC 2022

 

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