Crítica de Cine
“The Beguiled”: Sofia Coppola obtiene premio a mejor dirección en Cannes por una película fiel a su estilo.
Por Galia Bogolasky
«The Beguiled» es la película por la que Sofía Coppola gana el premio a mejor dirección en el Festival de Cannes. Es la adaptación de la película de Don Siegel con la actuación de Clint Eastwood. Es protagonizada por Nicole Kidman, Colin Farrell, Kirsten Dunst y Elle Fanning.
La historia es ambientada en el año 1864 durante la guerra de sucesión en el sur de Estados Unidos. Siete mujeres viven solas en un internado de niñas, dónde aprenden distintas cosas, desde clases de bordado y de inglés, hasta música y cocina.

En esta casa hay 5 alumnas y además de Mis Martha, también la institutriz Miss Edwina (Dunst) una mujer ignorada por su jefa y quien desea salir de esa casa con ansias. Cuando llega el Coronel John McBurney (Farrell) lesionado, Miss Martha decide ayudarlo, curándolo de su herida, a pesar de las suspicacias de las demás niñas, y de ella misma, que se ve enfrentada a la opción de ayudar o no ayudar a un posible enemigo, ya que no tienen claro quien es, ni cuáles son sus intenciones.
En un comienzo todas desconfían hasta que de pronto todas se enamoran de él, hay un solo paso, todas caen rendidas ante el encanto de este hombre, un tipo muy educado y amable. Pero mientras lo van incorporando e integrando en las actividades de la casa, van agarrando confianza, y quedan todas embobadas de este hombre apuesto y adorable, y mientras van perdiéndose con su atractivo, se dejan llevar por el deseo y ocurre la tragedia que hace que todo tome otro rumbo, y se gatille el drama.

En “The Beguiled” las mujeres están en una situación de aislamiento por el contexto de la guerra, por lo que sus pasiones ocultas les juegan una mala pasada. Ellas están acostumbradas a hacer todo solas, pero cuando llega un hombre amable y educado, todo cambia.

La cinta es estéticamente impecable, con una casa ambientada como la típica casa sureña de Estados Unidos de la época, que está en decadencia por la guerra, donde el jardín está destruido porque tampoco hay recursos para la mantención y eso se refleja en la historia. También es interesante el vestuario, y la importancia que va cobrando en la historia, donde todas están vestidas muy recatadas al comienzo y de a poco se van arreglando y mostrando más piel. Para Coppola el vestuario siempre ha sido algo que rescatar en su cine, ya que lo utiliza como lenguaje, que aporta a la historia.
La película no usa muchos planos cerrados, no se acerca mucho a los personajes, siempre manteniendo la distancia, nunca entrando mucho en las emociones de cada uno, optando por la objetividad visual.
“The Beguiled” termina con el mejor plano del largometraje. Un plano bello, un zoom out impactante, que queda como una postal para cerrar la historia y que queda en la memoria visual del espectador.
La película logra mostrar el talento comprobado de Sofía Coppola con un elenco de lujo y una historia que se centra en la tensión de la lucha de poder entre un hombre contra un grupo de mujeres. ¿Será posible ganar esa guerra? Las mujeres se defienden en una historia dramática donde Coppola logra plasmar su estilo, como siempre.