Por Vale Jauré
“Un Ladrón con Estilo” es un film de David Lowery del año 2018 (quien el año anterior dirigiera “A Ghost Story”) basado en un artículo escrito por David Grann para el New Yorker, sobre la vida de Forrest Tucker, interpretado maravillosamente por Robert Redford, quien pasado los setenta años continúa ejerciendo su oficio de toda la vida: asaltar bancos.
El personaje de Redford ha escapado desde los años cincuenta en múltiples oportunidades de cada una de las prisiones en que se ha encontrado, para volver a delinquir hasta que lo vuelvan a atrapar y así, con un deseo irrefrenable por continuar sintiendo la adrenalina de la vida fugitiva. Lo acompañan en sus andanzas por los años ochenta, que es donde se centra la película dos compañeros interpretados por Tom Waits y Danny Glover. Si el elenco no te llama la atención hasta ahora, quizás el interés romántico del protagonista, una madura y preciosa Sissy Spacek, podría terminar por convencerte.
El film aborda la vida de Forrest Tucker desde una postura romántica sobre un viejo que sinceramente ama lo que hace, que con carisma y audacia ha ido abordando cada nueva etapa que ha enfrentado, sin dejar que el hecho de ser un delincuente le quite lo caballero. Al otro lado de la vereda, está el personaje de Casey Affleck, quien es el detective John Hunt, quien entre sus cuestionamientos sobre su trabajo, se obsesiona con este grupo de casi jubilados que continúan robando, sin haber lesionado nunca a ninguna víctima. Hombres con códigos, claramente un estilo de vida de otros tiempos, incluso para aquellos que trabajan en una oficina de policías.
Y si bien, hay harto del juego del gato y el ratón, existe también una admiración hacia quien es tan apasionado que no le importa morir en su ley. No discutiremos sobre aquello que llamaremos vocación, pero en un diálogo queda bastante claro el móvil de Forrest Tucker, quien respecto a las posibilidades que él tiene de poder dedicarse a cualquier otra cosa, contesta: “No estoy hablando de hacer algo para vivir. Estoy hablando de hacer algo por lo que vivir.” Y esa mirada arrugada e iluminada que le imprime Robert Redford, permite que hagamos el viaje a su lado aun cuando es bastante reprochable moralmente en lo que se refiere a sus relaciones familiares.
Como un pequeño regalo para aquellos que son fanáticos del actor, entre quienes es imposible excluirme, existen varios recuerdos de las distintas fugas de cárceles del personaje en un montaje que mezcla actores haciendo de él en su juventud, una dosis de CGI para rejuvenecerlo, e imágenes de él mismo sacadas del drama “The Chase” del año 1966.
Esta película no tiene intenciones de epicidad ni de justificar el comportamiento de su protagonista, es una producción cinematográfica pequeña en cuanto a sus intenciones pero que por lo mismo se abre ante nuestros ojos sobre una historia pequeña, reflejada en su título original: “The Old Man and the Gun”. Un caballero y una pistola, es todo lo que se necesita a veces poner en pantalla para acercarnos a la grandiosidad del cine.
“The Oldman and the Gun”
PAIS: Estados Unidos
Género: Comedia, Drama, Crimen
DIRECTOR: David Lowery
DURACIÓN: 93 minutos
PROTAGONISTAS: Casey Affleck, Robert Redford, Sissy Spacek
